CUENTO "BRUNO". EVOLUCIÓN DEL DIBUJO. VIKTOR LOWENFELD.

BRUNO
(Lowenfeld para todos)











“Todos los niños empiezan con el garabateo, sean chinos o esquimales, americanos o europeos”(Kellogg, 1967)




Bruno agarró un crayón, miró la pared recién pintada y ¡zas!, sin darse cuenta, ese “palito” que encontró en la cartuchera de su hermana dejo una marca1. No pareció darle mucha importancia pero siguió pasando su manito con el pastelito por ahí, ni siquiera miraba lo que hacía. Trazos largos, cortos, sin dirección alguna2. Parecía que solo era una descarga,pues, su muñeca ni dedos controlaban lo que hacía.
Se sentía muy a gusto con este nuevo descubrimiento, dejaba su sello donde podía; hojas, paredes, muebles. A los dos años era todo un artista, su mamá se convirtió en su admiradora número uno3, de alguna manera sentía que Bruno se estaba comunicando con el mundo, y así era.
El manejo de sus actividades manuales todavía eran un pocodescontroladas, por eso tampoco podía comer sin mancharse la ropa, abrocharse los botones, no tenía establecido el control visual sobre sus movimientos.
Después de 6 meses de haber dado aquel trazo que le abrió camino en el mundo del arte, Bruno se dio cuenta que cuando movía su bracito con el crayón en la mano iba dejando marcas, descubrió la relación que había entre sus movimientos y las líneas que ibadejando. ¡Qué paso tan importante!4 Ahora puede controlar mucho de sus movimientos, aunque no a la perfección; aprendió a abrocharse la campera y cada vez se ensucia menos para comer… ¡su mamá chocha!
Cada día muestra mucho entusiasmo en sus dibujos, puede repetir líneas horizontales, verticales y puede hacer círculos, todavía no levanta el lápiz del papel así que hay muy pocos puntos o trazosrepetidos. Eso sí, ahora trata de usar diferentes colores y sus líneas son más largas. Es muy divertido ver los movimientos que va haciendo con su manito intentando agarrar sus lápices5.
Cerca de los 3 años ya podía copiar un circulo, pero los cuadrados le costaban un poco6, aunque no está entre sus preferencias reproducir dibujos de otros, prefiere los que hace el.
Lo que más le gusta es saber quepuede manejar sus movimientos y que sus obras de arte son muy bien recibidas por los adultos, ¡esto lo entusiasma cada vez más!
Una vez decorada su casa y la de sus abuelos, Bruno decidió dibujar a su mamá7, en medio de esas líneas estaba ella. ¡Cómo crece mi hijo! Pensó, aunque no pudo reconocerse ahí, pero si él dijo que era ella, no había por qué dudar.
Tanto le gustaba dibujar que a los tresaños y medio ya tenía su propia cajita con un montón de lápices, fibras, tizas y crayones8, podía pasar horas dibujando. A veces lo hacía por toda la hoja, otras quería contar lo que estaba haciendo, otras sabía que es lo que quería dibujar y otras se dejaba llevar por su imaginación apenas apoyaba el lápiz en el papel. Aunque los adultos no le encuentren significado y forma a las “líneas”, Brunosabia realmente que era cada una y porque las había dibujado9.
Los colores no eran importantes para él, su atención estaba puesta en el control de sus movimientos, recién cuando comenzó a darles nombres a sus dibujos se interesó un poco, solo para diferenciar a cada cual o quien, o solo por el simple hecho de experimentar.
Su mamá no salía del asombro de cuanto crecía y lo pícaro que era, peroclaro ella siempre intentó que él se estuviera en un ambiente con muchos estímulos visuales, esto favoreció en gran medida el desarrollo del niño y la interacción de el con el ambiente, lo cual es propicio para el aprendizaje.
Bruno comenzó la guardería, ahí conoció muchos chicos, que, como el, disfrutaban mucho de dibujar. Se hizo amigo de Mateo un niño muy tímido, que dibujaba siempre lo...