cuento - casitgo

Guion Literario

Alejandro se despertó en el bosque. Se encontraba mareado y confundido. No sabía cómo había llegado a tal lugar, no recordaba nada. Cuando se le aclaró la vista cayó en cuenta de que no estaba solo, lo acompañaban cuatro personas más. Los despertó sin saber qué sucedía a su alrededor. Ellos se fueron despertando paulatinamente. Se encontraban tan confundidos como Alejandro ycomenzaron a cuestionarlo, él no sabía qué responder. Aquí cada uno se introduce para que cada quien sepa los nombres de cada uno.
-¿Dónde mierda estamos? -preguntó con fuerza Xavier y con su cara desesperada y rascándose la cabeza (rascarse la cabeza es un tic que el man tiene).
-Ya les dije que no lo sé, yo acabo de despertar aquí también –se excusó Xavier.
Mientras tanto Julián solo miraba atodos los que tenía a su alrededor con un ligero susto y un ligero odio de desconfianza.
-Chicos… hay que mantener la calma. –dijo Ana mirando a Alejandro con un tilt-up o con una muestra de supuesta lascivia.
-No, hay que irnos… tenemos que huir, ¡rápido! –exclamó Xavier.
-Broder, tranquilízate un rato, ¿quieres? –le recriminó Alejandro. –hay que pensar bien las cosas. Claramente tiene quehaber una razón por la cual todos estemos aquí.
-¿A qué te refieres? Todo esto es una joda, alguna broma de algún cojudo… -dijo Andrés.
-¿Hay alguien aquí? –gritó Xavier.
Todos esperaron con ansias que alguien apareciera o algún tipo de señal, pero nunca apareció.
-Esto está mal, muy mal. Debemos irnos rápido de este bosque… -seguía insinuando Xavier.
-¿Y tú no vas a decir nada? ¿Te acuerdas dealgo? ¿Sabes por qué estamos aquí? –preguntó Alejandro a Julián.
Julián lo vio enojado, luego bajó la cabeza y respondió que no con un tono de voz ligeramente enojado. Alejandro se lo quedó viendo extraño al igual que todos.
-Bien, yo no sé nada de acampar y esas vainas pero si queremos que las cosas entre nosotros salgan bien vamos a tener que…
De repente se escuchó un sonido extraño entrelos arbustos.
-Qué fue esa webada, ¡Qué fue eso! –exclamó Xavier.
-Tranquilo hermano, pudo haber sido una ardilla. –dijo Andrés.
-No. No. No. ¡No puedo continuar así! Hay que salir. –dijo Xavier con un tono de voz desesperado, moviendo su cabeza de un lado al otro.
-Cálmate mierda, solo estamos en un puto bosque. –le recriminó Alejandro.
-Tiene razón, hay que tomarse las cosas con… -iba a decirAna.
-¡NO! –gritó entre sollozos –Hay que salir ya. –diciendo esto se fue corriendo desesperado cayéndose de vez en cuando.
Todos le gritaron que no huya.
-Este idiota no sabe que es mantenerse en equipo… -murmuró Alejandro. –Quédense aquí lo iré a buscar a ese idiota.
-Yo te acompaño –le dijo Ana.
-¡Nadie se mueva! –gritó Andrés terror. –Ac..accbo… sombra… -se agarra la cabeza- hay alguienque nos está viendo.
-Pues que salga el idiota –gritó desafiante Alejandro.
-Ahí –dijo Andrés señalando por un sendero- es alguien corriendo…
Esperaron con tensión a la persona hasta que se asomó: era el mismo Xavier.
-¡Qué mierda haces aquí!
Xavier parece ido, no se cree cómo ha llegado al mismo lugar.
-Estamos atrapados… -susurra Xavier- ¡Estamos atrapados!
-¡Ja! –se burla Andrés- cómovamos a estar atrapados en un bosque…
-Esperen, cómo Andrés pudo haber llegado por aquí si lo vimos yéndose por allá. Algo no está bien. –dice Ana.
Alejandro compartió el mismo pensamiento.
-iustitia, fortem, temperantia, prudentia. -resonó una voz en cada árbol del bosque con un eco que perturbaba.
Una misteriosa figura apareció en el parque entre los árboles. Se trataba de un hombre de medianaedad vestido extremadamente elegante. Los miraba con un rostro inexpresivo, se los quedó contemplando un buen tiempo.
-¿Oiga, pana, sabe en dónde estamos? –preguntó Andrés quien fue el primero en percatar su presencia.
El resto del grupo se llevó un susto al ver al hombre misterioso que llevaba una flor en el bolsillo de la chaqueta y la hacía girar de cuando en cuando. En especial Alejandro...