cuento corto de barriletes







Desde hace muchos años en una población pequeña de Guatemala llamada Sumpango se tiene como costumbre volar barriletes el de los Difuntos. Las personascreían que volando barriletes espantaban a los espíritus malos que mantenían inquietos a las almas buenas del cementerio y por eso en este preciso lugar era en donde seelevaban.
Recuerdo que de niño nos preparábamos con mis hermanos con varios días de anticipación, caminábamos por los bosques buscando un bulbo que llamábamoscebollín que nos proporcionaba el pegamento necesario para pegar el papel. Al mismo tiempo a orillas de los barrancos cortábamos las varas de una planta llamada cola decoyote que no servía para hacer la armazón o esqueleto de nuestro barrilete, todos colaboraban con la causa porque mi mamá hacia un largo viaje a una ciudad cercana paracomprarnos pitón (fibra que se extraía de las hojas del maguey) que más tarde serviría para preparar el cordel que llevaría alto, muy alto nuestro barrilete.
Cuandoteníamos reunido todo el material procedíamos a elaborar con mucho entusiasmo nuestro barrilete y nos uníamos a la tradición de la pequeña comunidad.
Con el paso de los añosjunto a un grupo de jóvenes decidimos organizar un concurso de barriletes y para sorpresa nuestra fue un éxito. Los niños y jóvenes participaban y dejaban ver grandesmuestras de creatividad.
Desde entonces esta actividad fue realizada como una tradición familiar en la que participan muchas personas, y los barriletes que vemos sontan grandes que estamos seguros que las almas buenas disfrutan tanto del espectáculo como todos los que presencian su vuelo.
Relato oral del Abuelo Martín.