Cuento de escuela

Una vez en un recreo Rosita y Tomás estaban jugando a las carreras y claro al ser Rosita mayor que Tomás por unos meses pues solo tenían 7 años, ella siempre tomaba ventaja. Esa tarde Tomásdispuesto a ganar esta vez, decidió tomar un atajo por el jardín.
Ambos niños salen corriendo a lo que daban sus pequeñas piernas. Cuando se acercaban a la esquina de la escuela donde estaba el jardínRosita ya le había sacado casi un cuerpo de ventaja a Tomás, entonces al cruzar la esquina el decide irse por dentro de la jardinera para alcanzarla, en ese momento Tomás no se da cuenta que habían regadola grama y estaba mojado, el niño resbala y cae al suelo con gran fuerza. Al caer el pequeño también hace caer a Rosita quien golpea con fuerza el suelo.
Ambos niños están muy maltratados y losllantos no se hacen esperar, varios de sus compañeritos que observaban la carrera salen a llamar a los maestros, quienes de inmediato llevan a los niños al servicio de la Cruz Roja. Ambos niños lloran sinconsuelo con sus brazos raspados y con moretones.
El personal de la cris roja atiende a los niños y los llevan a la sala de enfermería para revisarlos, en ese momento se dan cuenta de que Rositaquien golpeó con fuerza el suelo al caer, se había golpeado fuertemente la boca y la tenía muy inflamada, entonces llaman al personal de odontología para que revise a Rosita en su llanto ensordecedor.En ese momento la odontólogo se da cuenta de que Rosita se ha partido un diente, ahora todos entienden el dolor de la pequeña. Rápidamente la odontólogo se encarga de calmar a la niña con palabras dealiento y consolándola con caricias en su pequeña cabeza y mientras tanto observa que la fractura del diente no es muy grave, por lo que inmediatamente comienza a realizarle un tratamiento que permitasalvarle el diente.
Finalmente el personal de la cruz roja se encarga de sanar sus rapones así como los de Tomás. Luego de este enorme susto los dos pequeños se marcharon junto con sus maestros,...