Cuento De Odisea Y Los Cíclopes

Por fin había llegado el gran día , Juan pablo se despertó muy exitado, durante todo el año había acumulado muchas ansias . Las dos últimas semanas , de preparativo, habían transcurrido muy lentas para el joven, en un estado de creciente ansiedad, odiaba tener que esperar y no paraba de contar los días para su tan ansiado viaje a la Isla de los Cíclopes .
Y al fin llegó el día .Unos dieciséisamigos salieron por su travesía en el mar con rumbo a la Isla de los Cíclopes , donde se decía que habitaban extrañas criaturas y a las que ellos querían conocer. Todo era una gran aventura y sabían que podía ser de terror
Fueron largos días y noches que tuvieron que navegar hasta llegar al lugar. Finalmente una mañana muy temprano avistaron la Isla , donde se veía una alta montaña. En pocollegaron a la orilla y rápidamente juntaron sus pertenecías y comenzaron a caminar. En menos de una hora estaban ante la imponente montaña , que poseía una caverna . En un instante fueron escuchados y recibidos cordialmente por sus moradores que les ofrecieron agua y comida.
El día transcurrió muy tranquilo y pudieron disfrutar de su estadía recorriendo el lugar.
Al llegar la noche la isla se transformóen un lugar oscuro y tenebroso , cubierto por una niebla muy espesa. Los moradores les sirvieron una gran cena y cansados se fueron a dormir. De repente en medio de la noche escucharon un gran rugido que los despertó. Desde el interior de la caverna salió un gran monstruo de más de cinco metros que se dirigía a ellos con intención de hacerlos su cena. Rápidamente se escondieron en un pasillo dela caverna donde los anchos brazos de la inmensa criatura no los podía alcanzar. Y fue el momento donde comenzaron a pensar que hacer. Juan pablo sabía de antemano a lo que se podían exponer y había llevado consigo un arco con flechas que contenían en sus puntas un líquido adormecedor, pero al que no podia sacar de sus pertenencias debido a que habían sido sorprendidos mientras dormían. Yentonces comenzaron a pensar cómo llegar hasta el lugar donde se encontraban. La noche fue muy larga y de terror, todos temían por su vida debido a que sabían que el monstruo era carnívoro y cualquiera de ellos podía ser su cena. Al amanecer el monstruo se quedó dormido y Juan pablo aprovechó para ir y buscar su flecha tan ansiada. Nadie se atrevió a salir de su escondite tan preciado y pasaron el díaescondidos en ese lugar, sin comer ni beber nada. Y de nuevo llegó la noche y a la madrugada el mismo rugido los despertó. El monstruo enojado metía sus largos y anchos brazos en el pasadizo sin poderlos alcanzar. Al no poder alcanzar a ninguno de ellos tomó a uno de sus moradores y se lo devoró en presencia de ellos que estaban muy asustados y se durmió. Entonces allí aprovechó Juan pablo y le tirócon su arco muchas flechas que adormecieron al monstruo. Inmediatamente se aseguraron que dormía y aprovecharon para salir de su escondite, tomaron sus pertenencias y muy asustados emprendieron el regreso en su barco y así contaron en su regreso su gran aventur
N oble Atrida, soberano de tu pueblo, Agamenón, ¿qué Ker de la triste muerte te ha domeñado? ¿Es que te sometió en las naves Poseidónlevantando inmenso soplo de crueles vientos?, ¿o te hirieron en tierra hombres enemigos por robar bueyes y hermosos rebaños de ovejas o por luchar por tu ciudad y tus mujeres?
Así dije, y él, respondiéndome, habló enseguida:
Hijo de Laertes, de linaje divino, Odiseo rico en ardides, no me ha sometido Poseidón en las naves levantando inmenso soplo de crueles vientos ni me hirieron en tierra hombresenemigos, sino que Egisto me urdió la muerte y el destino, y me asesinó en compañía de mi funesta esposa, invitándome a entrar en casa, recibiéndome al banquete, como el que mata a un novillo junto al pesebre. Así perecí con la muerte más miserable, y en torno mío eran asesinados cruelmente otros compañeros, como los jabalíes albidenses que son sacrificados en las nupcias de un poderoso o en un...