Cuento Infantil

Hace mucho, mucho tiempo, en un bosque de una tierra muy lejana, vivía una familia de gatos monteses, papá gato y mamá gato. En aquellos días, iniciaban una nueva vida. Ya que, anteriormente, papágato vivía solo y en otro bosque mucho más lejano. Los días pasaron en su nueva vida, hasta que llego el tiempo señalado para que mamá gato diera a luz. Ahora sí era una familia. Papá gato estaba feliz.Ahora tenía cuatro nuevos miembros en su familia, cuatro pequeños y juguetones miembros en la familia.

Pero algo no convenció totalmente a papá gato, aunque él trato de no darle importancia,nunca pensó que sus propios amigos se lo hicieran notar tanto.

-Negro? -expresó de forma reacia el señor topo- ¿Cómo es posible que uno de tus hijos sea negro?
Efectivamente, uno de los hijos de papágato y mamá gato era negro. ¿Qué hay de malo en que dos gatos monteses tengan un hijo de color negro?
-Ja! ya dice el dicho -tomó la palabra la anciana tortuga- Si te nace un gato negro tendrás 7años de mala suerte!
-El dicho es: Si te cruzas con un gato negro -corrigió el Ruiseñor- tendrás siete años de mala suerte.

Y efectivamente.
Entre los animales rondaba una vieja superstición. Losgatos negros eran de mala suerte para cualquiera que se cruzara con uno de ellos. y eran de más mala suerte, si tenías un hijo que fuera un gato de color negro.

Los años pasaron, los hijos de papágato crecieron a la vez, hasta que llegó el momento en que irían por primera vez a la escuela. Mamá gato los ayudó a prepararse, primero dio el almuerzo a su hijo mayor, Alan. Luego a su hija mayor,Sophie. Después a su hija menor, Angee. Hasta dárselo a su hijo menor, el gatito de color negro, Miso.
Así pasaron los meses en la escuela. Alan era un gatito muy inteligente, Sophie una gatita muy ágil,Angee era muy talentosa pero Miso no lograba destacar en nada que fuera de la escuela.

-Y bien Miso -preguntó el pequeño oso- que nos tienes para hoy?
-esperamos que sea mejor -apoyó el...