cuento inventado
(Version editada)
Había una vez en una ciudad llamada Hamelin donde todos los ciudadanos vivían felices ya que era una ciudad muy pacífica cerca de un hermoso rio, la gente de Hamelin amaba vivir ahí.
Hasta que un día una terrible manada de perros salvajes invadió la gran ciudad, la gente estaba aterrada por el desastre que causaban los perros, tiraban la basura y enciertas ocasiones mordían o devoraban a la gente e incluso se metían a las casas y las destrozaban, sus ladridos molestaban en la noche y la gente no podía ni dormir, la gente los consideraba demonios. La vida en Hamelin se había tornado horrorosa.
La gente estaba furiosa y decidieron hacer una huelga afuera de la casa del presidente para que acabara con los perros, el presidente desesperado al nopoder calmar a la gente decidió llamar a un cazador profesional, prometiéndole que si eliminaba la manada de feroces perros le daría mil dólares. Al día siguiente llego el cazador con armas profesionales y al llegar a la ciudad la manada de perros salieron a atacarlo. Aquel hombre no parecía alguien normal estaba cubierto por un traje de cuero y una máscara tapaba la mitad de su cara únicamentese la quitaba para usar cierto instrumento. Lo más raro eran sus ojos rojos y con tres pequeños puntos rodeando su pupila, usaba un gorro y un fleco de pelo pasaba por su cara pero a pesar de eso no parecía un monstruo solo era alguien diferente y algo escalofriante.
Los ciudadanos lo miraban desde los edificios y casas temerosos, pero con la ilusión de que las potentes armas del cazador acabarancon la manada de pestes. Los perros y el cazador hicieron contacto visual por un momento, no se movían parecían estar paralizados; hasta que el cazador sonrió de forma maliciosa y dio una carcajada sarcástica de cierta forma se burlaba de la situación. El cazador metió la mano dentro de su mochila, todos esperaban ver un arma grande y feroz; sin embargo no podían creer que el cazador eligiera unasimple flauta en lugar de todas sus increíbles armas, aunque el cazador era el único que sabía en ese momento el poder del simple instrumento. Nada cambiaba el hecho de que solo era una flauta pero era diferente a una normal, era un poco más larga y de color negra, además alrededor de ella tenía una escritura en un idioma que solo el poseedor conocía.
De repente la manada de perros comenzó amoverse y correr rápidamente hacia el cazador, se podía ver que estaban más molestos de lo usual, aunque el cazador solo miraba con esa sonrisa maliciosa y cuando estaban a punto de atacarle puso la flauta entre su boca y comenzó a tocar una melodía hermosa pero con un sonido agudo que hacía que la bella melodía también fuera atemorizante. El cazador comenzó a avanzar por la carretera de salida y lamanada lo seguía atraídos por aquel sonido, el cazador cambio de ruta y tomo el camino hacia el rio donde, se detuvo y cambio el sonido, esta vez era un sonido muy agudo y potente, atemorizante y horrible aquellas bestias comenzaron a aullar de dolor cada nota de la melodía parecía ser un golpe que los hería, hasta que finalmente murieron, el cazador solo los miraba con frialdad y después los lanzoal rio.
Cuando cumplió lo prometido el tenebroso cazador volvió a la ciudad a reclamar su recompensa, al llegar toda la gente comenzó a brincar de alegría, el hombre fue hacia el presidente que también parecía alegre y le dijo:
-Eh cumplido con lo que me has pedido, así que vine a recoger lo que me debes. (Con aquella sonrisa maliciosa)
-Realmente crees que te pagare eso ¡MIL DOLARES! porfavor quien te pagaría eso por tan estúpido trabajo.
-Bueno aparte de mi nadie pudo librarlos de aquellas bestias.
-Lo único que puedo darte son cien dólares y una oferta a cenar conmigo y mi familia.
La sonrisa del cazador desapareció de su rostro y su mirada era aún más fría que antes e incluso sus ojos miraban con furia al alcalde.
-Si no me pagas te arrepentirás, odio tener que ponerme...
Regístrate para leer el documento completo.