Cuento

Terror en el Aula
Rodrigo Caldera
11vo Grado
El reloj se movía lento, se oía una voz en el aula pero nadie le prestaba atención pues la atracción principal del día era el relojy los estudiantes no le quitaron los ojos de encima. La voz provenía de la única adulta en la habitación, una pequeña mujer trigueña de aproximadamente treinta años de edad. Ellaestaba alterada porque ningún estudiante le entregó el ensayo que había dejado de tarea el día anterior. El timbre estalló y, como si fueran la carrera de 200 metros en lasolimpiadas de Beijing, una estampida de estudiantes en plena pubertad salió aliviada.
Sólo quedó la pequeña mujer en aquella aula de clases, pues debía engrapar unos papeles. En lo queabrió la gaveta salió, como una pelota ardiente de lava, un chorro de aceite que aterrizó en su pecho. La mujer retrocedió y cayó sentada en su silla, la sintió fría como una bolsa denitrógeno líquido. De un salto, el pequeño cuerpo se incorporó y se apoyó, que estaba tan caliente como el centro de la tierra en un día soleado, su piel se torno roja como una carnede res. En su desesperación ella buscó ayuda en las ventanas, sin embargo estaban cubiertas por una fina capa negra que se da cuando un vidrio es sometido a altas temperaturas. Enun estado de pánico la mujer se desplomó y se arrastró por el suelo al centro de la clase. En medio de su agonía la mujer vio a los escritorios tomar vida y caminar hacia ella comoarañas y atacarla. Los escritorios la estrangulaban hasta dejarla sin aire cuando el último suspiro salió del pequeño cuerpo, la alarma en su mesa de noche sonó.
Se cayó de la camay temblando se postró al pie de la mesa de noche. Y ahí quedó. De ese día en adelante usaron un maestro suplente para dar su clase. Desde entonces las cosas no fueron las mismas.