Cuento


Érase una vez…
Dos pueblos cercanos separados por un río y una hermosa pradera, llena de flores y animalitos.








En uno de los pueblos llamado “Gigantón”, vivía Marta juntoa sus padres. En él, todos eran
muy altos,
tan altos,
como torres.
Lo que más le gustaba a Marta era jugar por la pradera. Allí iba todos los días, le encantaba correr, saltar, cantar ycoger hermosas florecitas.


En el otro pueblo, llamado “Pequeñuelo”, vivía María con sus padres. En él, todos eran muy muy
bajitos. Al
igual que
a Marta,
a María le encantaba jugar por lapradera. Pero su mamá, siempre le decía que tuviera mucho cuidado, porque era pequeñita y se podía perder.


¡Pero a que no sabéis una cosa! La gente de estos dos pueblos, no sabían por qué,pero no se gustaban nada.
Los “Gigantones” siempre hablaban mal de los “Pequeñuelos” y éstos, cuando veían a un “Gigantón” siempre huían, porque su altura les asustaba.




Un día Marta ledijo a su mamá:
Mami, ¿puedo ir a la pradera a jugar?
Ésta la dejó, pero le puso como condición, que a la vuelta comprara el pan.
Me quedaré la moneda en el bolsillo para que no se me pierda– dijo Marta.





Ese mismo día, María tuvo la misma idea y le pidió permiso a su mamá para ir a la pradera a jugar.
¡Vale mami!
No te
preocupes que
me portaré bien
y no llegarétarde – dijo María.



La pradera estaba preciosa, el sol brillaba, los pajaritos cantaban y había muchas flores de todos los colores.
María iba caminando, pero de repente vio a Martay rápidamente se escondió detrás de una flor. Mientras Marta, corría y saltaba, con tan mala fortuna, que se le cayó la moneda del bolsillo y ésta rodó hasta los pies de María.



Martabusco y busco la moneda, pero no la encontraba.
(Snif, snif) ¡Qué triste estoy! No encuentro
la moneda y
mi mamá se
enfadará. ¡Qué
puedo hacer!
Tengo que
comprar el
pan – dijo Marta....