Cuento

Me encontraba en la cama con los ojos abiertos pensando si mi marido iba a volver, mi hijo de 5 años me preguntaba todas las mañana cuando íbamos a volver a verlo. Nunca sabía que responderle.Siempre le decía: Pronto. Pero porque te tenías que ir, David- me la pasaba susurrándolo. Aún recuerdo su olor, sus caricias, su sonrisa y más que nada sus ojos, esos ojos que aun hoy me seguíanenamorando.
Era una mañana de agosto, me disponía a ir al aeropuerto, a eso de las 10, iba en busca de mi marido, quería darle una sorpresa y más que nada rogarle para que volviera. Pero el vuelo se habíaretrasado, tenía que esperar 3 horas más, para al fin poderlo arribar. Lo siguiente que hice fue sentarme, y cerrar los ojos, no me di cuenta fue en que momento caí en un profundo sueño. No sé cuántotiempo había transcurrido, pero me había despertado, por un terrible ruido. Me levante asustada, no sabía lo que pasaba a mi alrededor, la gente se encontraba muy tranquila, caminando, limpiando,atendiendo a las demás personas, etc. Pero afuera del aeropuerto a través de la ventana, se podía divisar la catástrofe que se estaba presenciando en la ciudad: edificios destruidos, ríos contaminados,fábricas por doquier, nubes negras, gases contaminantes, personas enfermas y lo más grave aún, no había naturaleza, estaba totalmente desierto. No sabía si gritar, si llorar, no sabía qué hacer, me sentíainútil, porque en la tierra estaba pasando eso, porque solo yo podía verlo, porque la demás gente no se daba cuenta de lo que estaba pasando. En fin no sabía si esto era real o aún seguía dormida y eraun mal sueño.
Estaba tirada en el suelo, cuando escuche un golpeteo en la ventana, al levantar la mirada, pude ver que un muchacho, de unos 25 años, estaba parado junto en frente de mí, se quedómirándome y luego me hizo una seña de que lo siguiera. Pero como iba a seguirlo si ni siquiera podía romper la ventana, mucho menos la iba a traspasar, me quede parada e inmóvil, algo en ese muchacho,...