Cuento

Con olor a indigencia
SUS HISTORIAS SON INTENSAS, LLENAS DE VERDADES CRUELES que entretienen a los que fueron testigos. No tiene lamentos para el mundo, como he dicho, solo historias que urgen serescuchadas. Ella se llama mal vestida, y se había trepado al bus que llevaba al sur. Canceló su pasaje como cualquiera, llevaba olor a indigencia. Lo primero que se le ocurrió hacer fue descolgar desu hombro una bolsa en la que cargaba decenas de monedas de diferente denominación, esa era su ganancia, la que le regalan en las calles. Contaba, o quizá solo se las presumía a los infelices de suspadres que duermen panza arriba en el cementerio. Entonces, sin dejar a un lado el dinero, empezó a platicar con la mujer que iba sentada detrás. Decía muchas cosas y la mayoría de pasajeros leimportó lo mismo que los descuartizados de la extra. Poco a poco sus palabras fueron tomando forma y al corto tiempo, una historia de vida relució ante un público que se afanaba por no entender. Fuejusto para mi cumpleaños, dijo, tenía para comer, pero me faltaba para el vicio. Yo tomo, fumo y también me inyecto, porqué voy a negarlo. Ese día se me antojó trabajar limpiando los parabrisas a loscarros. Todo iba tranquilo hasta que me tocó uno de lujo, de esos que ni siquiera se pueden ver a través del vidrio. Le tiré jabón al parabrisas y entonces el que conducía se asomó por la ventana ainsultarme. Me quedé fría porque usted sabe cómo es esto, guardé mi trapo y el resto de mis cosas esperando que el semáforo lo largue de mi vista. El hombre no se aguantó las ganas y me dijo: ladronahija de puta, a mí me quieres engañar. Qué podía hacer yo, haber dígame, lo escupí en toda la cara y fue por eso que se bajó del carro y me agarró a golpes. No sé de dónde me apareció una piedra, perose la atiné en toda la cabeza. Después corrí como loca y ya no supe más, lo habré matado, no sé.
Se treparon al bus unos músicos y le hicieron bajar el volumen de la radio al chofer. Preparaban sus...