cuento

Los patos de Sofia y Natalia
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Una mañana, Sofia y Natalia, las pastoras de la granja Alegría, se levantaron con el canto del gallo Leoponcio: ¡Quiquiriquí, Quiquiriquí¡. Sofia y Nataliabostezan, se estiran, y dicen: ¡Buenos días!
Las dos van a la cocina, desayunan leche con cereales y se meten en la ducha cantando: ¡Qué rico, qué rico es ducharse! ¡Qué rico, qué rico! mi cuerpo sequeda limpio y fresco, es un día precioso y estamos ¡alegres y limpias!
Se visten y se van a saludar a sus animales: los caballos, los cerdos, las gallinas……
¡De repente! ¡Oh no! No puedo creerlodijo Natalia. ¡La puerta del corral está abierta! Los patos se escaparon.
Rápidamente cogieron comida, agua, la guardaron en sus mochilas y salieron a buscar a sus patos.
Comenzaron a caminar ygritaron sus nombres, pero no respondió nadie. primero dieron pasos grandes, luego caminaron más rápido y por último empezaron a correr
Dejaron de correr, bebieron un poco de agua y se pusieron adescansar. Estiraron sus piernas, su tronco, brazos y, luego, comenzaron a caminar otra vez.
Caminando se encontraron un inmenso árbol y Sofia preguntó: - ¿Subimos y buscamos desde lo alto del árbol anuestros patos?
Natalia dijo: ¡Subamos!
Es una pena que no lo hayamos visto
Siguieron su camino y se encontraron un boquete muy grande ¿Qué vamos hacer? Preguntó Natalia. Cojamos el tronco de Pinoy lo colocamos de lado para poder pasar por encima del él, dijo Sofia. Los dos cogieron el tronco, lo colocaron y pasaron por encima de él.
Natalia comenzó a mirar los árboles y dijo: ¡Ey! Hayunas manzanas en ese manzano, podemos saltar, cogerlas y comérnoslas. De acuerdo dijo Sofia. Las dos saltaron hasta alcanzarlas y comenzaron a comérselas.
De repente, Natalia escucha una voz muy bajay Sofia deja de caminar. ¡Por favor! ¡Por favor! ¡Ayúdenme!. Sofia y Natalia no sabían de donde era esa voz y colocaron sus manos en las orejas para poder localizar el sonido.
La voz era de una...