cuento

RÉQUIEM A UN AMIGO

Estaba ahí de pie, grande como era, a la orilla del camino. Bondadoso, delicado a pesar de su fuerza. Daba alimento a muchospajaritos que contentos revoloteaban en sus enormes brazos, sintiéndose seguros a su cobijo, comiendo de sus manos. Contemplarlo a cualquier hora del día,formando parte del paisaje, con todo su gran peso sobre la tierra que amaba y le daba sustento, pues vivía de la tierra y del aire, y devolvía a ellalo que no ocupaba, y sus desechos la enriquecían.
Daba calor, daba alimento, daba amor, y por ello lo mataron; como a aquel otro que también nos amó yfue su crucifixión, su mayor acto de AMOR.
Así es también esta historia, un día como los otros lo vi tirado cuan largo era sobre el suelo, su gruesotorso, sus enormes brazos ¡MUERTO! Sus asesinos lo mutilaban sin compasión, y él, aun muerto seguiría sirviendo a los demás, aún aquellos que sincomprendedlo, que sin pensar en los que más lo amaban: los pajaritos, otros animalitos y alguna gente, lo hicieron pedazos. Era hermoso, era bello, era ungigante dando amor, tan grato estar a su lado, una buena influencia, una buena sombra. Daba lo que tenía, sin ningún egoísmo, se daba a sí mismo yseguirá haciéndolo aún ahora que fue muerto.
Yo lo amaba y lo echaré de menos para siempre, y espero su resurrección, junto con otros iguales a él, con lasegunda venida de Cristo, con el reino de Dios aquí en la tierra. Mientras tanto ¡ADIÓS AMIGO! ¡Descansa en paz mi querido árbol del camino!
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