Cuento
Había una vez una familia que decidió emigrar de su pueblo a una ciudad muy poblada y con muchos avances tecnológicos.
La familia Roy estaba conformada porel Señor Ramón y la Señora Dora, eran un matrimonio joven con deseos de concebir un bebe.
Esta familia se trasladaba desde un pequeño poblado del estado de Veracruz, y hablaba un idioma muydiferente a los demás, su estado económico era critico su vestimenta muy rara, por tal motivo la gente que vivía a su alrededor se burlaba constantemente de ellos, los humillaban y los hacían sentir muypoca cosa.
Para Don Ramón la situación era muy difícil ya que no tenia estudios y así no podía obtener un trabajo estable, pasaron algunos días sin comer sin tener un techo donde vivir, peroel deseo de salir adelante era demasiado. Los días eran largos y soleados, las noches frías y ellos con un hambre insaciable, afortunadamente una familia muy generosa les brindo un techo donde dormiry un delicioso plato de comida. Él salió en busca de algún trabajo y para su buena suerte encontró en su camino un joven albañil el cual sin pensarlo lo acepto, feliz don Ramón empezó a trabar deayudante. Su joven mujer lo esperaba en la casa de los buenos señores haciendo la limpieza.
Después de algunos meses de mucho trabajo la pareja compro un pequeño solar con un dos cuartitosconstruidos de palos, cartones y palmas, muy humilde pero ellos felices del avance.
Se encontraban sumamente felices por su casa pero aun más por el próximo integrante de la familia, todo parecía irexcelente y aún más cuando el gracias a su esfuerzo y dedicación consiguió un trabajo mucho mejor, en una constructora importante. Fueron varios años de lucha para darle a su hijo una mejor vida.Alejandro su hijo estudio los primeros años de preescolar y primaria, cuando cursaba el quinto grado su padre sufrió un accidente en el trabajo lo cual lo llevo al hospital, y ahí permaneció por varios...
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