Cuento

DON CHULETA
La tentación mato al gato o el gato mato a la tentación, de algo estaba seguro lo hecho hecho esta y no hay vuelta de página.
Ya son las ocho de la mañana ¿Qué hacer?..., María no hallegado ni ha puesto los pies en casa desde la noche pasada ¿se la habrá tragado la tierra? ¡Imposible! Dijo que iría a casa de su madre. Una de esas mujeres entrometidas y altaneras, de aquellas conlas cuales no se puede llevar a cabo una conversación con ninguna persona y especialmente entre nosotros dos, puesto cuando estamos frente a frente es el comienzo del apocalipsis.
De tan solo pensaren esa maldita vieja, me causo un dolor de cabeza horrible.
-Puff condenada le da honor a su nombre ¡Dolores ¡
Decía mientras afilaba los cuchillos para rebanar la res.
-Buenos días Ramsés
Estabatan inundado en mis pensamientos que apenas alcance a reaccionar con un gesto al saludo de blanquita, que pasaba de costumbre frente a la carnicería.
De un momento a otro alcance a percibir el sonardel teléfono, nuevamente le puse poca atención, y deje que la contestadora sonara.
-Hola amor nada más llamaba para decirte y avisarte que me quedare otro día en la casa de mi madre, bueno te deseolindo día te amo.
Algo pensativo tras el mensaje de María cuando el cuchillo partía la res y Gerardo el chorizo acomodaba. María me pondría los cuernos, rezumbaba ese pensamiento pared tras paredde mi inquietada cabeza, exclame.
-¡Ja ¡ qué tontería
Al finalizar el día, como es de costumbre realice un inventario del producto vendido, sin tener la intención me fije que la hoja afilado estabadesgastada. Ya marcaban las ocho en el reloj, me dije a mi mismo.
-Pues aún tengo tiempo deja aprovechar cada minuto del día.
Cerré el local con precaución puesto que ya era un poco tarde. Tome lasllaves y el fui al coche a buscar la hoja en Gren, un local reconocido por su diversidad de utensilios de cocina y calidad.
Cuando salí del local y me dirigía a casa, recordé que me quedaba de...