Cuento
Había una vez una familia que vivía en el área metropolitana en una casa alquilada. Esta familia estaba compuesta por mama, abuela y dos pequeños chicos llamadosBereshit y Enrique, que vivían la ilusión de tener una casa propia y una mascota. Pasaban los día, los años y nada sucedía, los chicos siempre con la ilusión todas las noches antesde irse a dormir y darle las buenas noches (uni), preguntaban a mama cuando tendrían su casa propia. Su madre les respondía, “tranquilos que el Dios de los cielos nos tiene algopreparado”. Los chicos contentos gritaban, ¡bien! (uni). Ellos confiaban en esa palabra que les decía su mama, daban la vuelta se acostaban hasta que la luz ilumino el día.(uni)Mientras la madre, afligida, oró toda la noche.(bimen).Sin embargo no(uni) solo el tener un hogar propio era la ilusión a este le acompañaba el deseo de Bereshit tener su propia mascotala cual pudiera cuidar y jugar a su antojo, ya que donde vivían no les permitían tener mascotas. Ya no (uni) era una sino dos anhelos que estaban bien profundo en su mente.
Pasabanlos días y meses hasta que llego el gran día esperado, que alegría y gozo poder tener las llaves de nuestro hogar. Ese día Bereshit corrió tras el camión (bimen) de la emoción. Nosgusta la casa, las casa de paredes blancas (uni), aunque este verano es muy caluroso (bimen), el cuarto está muy bien arreglado (bimen), y me gusta mucho por lo cómodo que es. Haydías en que mi hermana sale diariamente al balcón. (bimen) a distraerse con los autos y las personas que suben y bajan por la avenida. Ahora en la casa nueva nos visitan a menudoaunque comen y se van (bimen). Al fin Bereshit pudo tener su mascota, el perro sigue jugando con su hueso plástico en el jardín,(bimen) esta tan contento como nosotros.
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