Cuento
Así comotú, existen cientos, miles, millones y seguramente sea un número desorbitante de humanos en el mundo. Éstos al igual que tú poseen vida propia, actúan de manera ajena a la vida de los demás y es evidenteque también tienen una manera distinta de apreciar las cosas.
Inevitablemente en nuestro proceso de desarrollo que comprende toda la estancia activa de una persona en la tierra, nos damos cuentaque además de nosotros existen otros seres vivos, las plantas y los animales que aunque no tienen un razonamiento, ellos al igual que el humano poseen vida, son poseedores de “el gran obsequio”denominado así por distintos personajes y filósofos de la historia.
Con las experiencias frutos del tiempo vivido o el resultado de haber asistido a una escuela resulta evidente que quien habita la mayorparte de la Tierra no somos nosotros, son los distintos organismos vivientes, se trata de la flora y fauna. Después de comprender todo eso y nos preguntamos: ¿nosotros somos dueños del planeta?Fácilmente se le puede dar una respuesta aquella cuestión, a menos que no se posea el sentido común.
No es algo complicado el hecho de saber y hasta sobra el decir que los humanos están causando estragosen todo el ambiente, tan sólo para lograr vivir de una forma más cómoda que para nada es justificable, nosotros podríamos decir: bueno, está bien que hagan lo que deseen. Pero no sólo se trata de eso,lo que ocurre es que no son los únicos que habitan en esos lugares también están ellos, los animales, las plantas.
Y que acurre cuando no se tiene consideración de éstos, como ocurre en...
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