Cuento

15 de julio de 2014
Virgilio Quejada
No Era Tan Fácil Como Pensaba
Un campesino y su esposa discutían frecuentemente. Según decía el, las tareas del hogar eran pocas yfáciles de hacer y, en cambio, el trabajo del campo era muy duro. Un día, decidieron cambiar sus ocupaciones: la mujer se fue al campo y el marido se quedó en casa.
--Saca a pastar lasovejas, da de comer a los pollos y prepara la comida --le dijo la mujer al campesino, antes de irse al campo.
El campesino saco las ovejas a pastar, pero se le escaparon algunas.Ato los pollos a la pata de una gallina y empezó a preparar la comida. Apenas había comenzado la tarea, cuando escucho el asustado cacareo de las gallinas. Salió corriendo y vio unenorme gavilán que se llevaba volando la gallina con sus pollitos atados. Mientras tanto, los cerdos entraron en la casa y tiraron las ollas. El pobre hombre no sabía q hacer.Cuando la mujer regreso vio aquel tiradero de comida, entonces pregunto por los pollos y la gallina. El hombre le conto que se los avía llevado el gavilán.
--¡Perfecto! –Dijo lamujer. —yo, en cambio, he hecho hoy tanto como cualquier día y, además he llegado temprano a casa.
--Es que en el campo se hace una sola cosa, mientras que aquí hay q hacer todo ala vez. ¡No se pueden hacer tantas cosas al mismo tiempo!
--Yo las hago todos los días y las hago bien, así que no discutamos más. Y no vuelvas a decir que las tareas de la casason pocas y fáciles de hacer –afirmó la mujer.
--Yo las hago todos los días y las hago bien, así que no discutamos más. Y no vuelvas a decir que las tareas de la casa son pocas yfáciles de hacer –afirmó la mujer.
“Quien quiere hacer algo encuentra un medio, quien no quiere hacer nada encuentra una excusa”







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