Cuento
10 meses
Extrañamente, me acostumbré. A veces me pregunto frente al espejo: -¿Cómo fue?- me miro y me encojo de hombros sin encontrar una respuesta. No lo entiendo, no comprendo, no caigo.
Tengo pocos recuerdos, pero muy precisos. Puedo ubicarlos en el tiempo y de hecho recuerdo lo que sentía a cada instante.
Faltaban horas para el primer día de clases. No estaba entusiasmada con volver,pero las ganas de ver a mis amigos hacían que fuera con una sonrisa.
No esperaba nada distinto, creía que iba a ser como otros años, digo, empezar tercer año era igual que empezar primero o segundo. Llegué temprano, como costumbre. En el medio del patio, sola, ya había visto a algunos compañeros, pero como nunca les había hablado, no lo iba a hacer en esa ocasión, todos comentaban, cada uno con sugrupo de amigos, algo que no llegué a escuchar con precisión. Sus caras mezclaban desilusión, preocupación y hasta desinterés; hablaban del mismo tema.
De un segundo a otro aparecieron mis amigos,los seis, sonreí de oreja a oreja, pero duró poco. Me di cuenta de que se habían organizado para llegar todos juntos y no me habían avisado, Pensé que no existía.
Se quedaron hablando en una rondacomo lo hacíamos de costumbre, pero no me habían saludado, y eso que yo estaba a pocos metros. Los noté distintos, no eran los mismos que yo reconocía como mis amigos del año anterior, pero no sabríaexplicar en qué habían cambiado. Subí a mi aula, me senté sola, cuando me miraban, lo hacían como si yo fuese otra, sin embargo, estoy segura de que tenía el mismo pelo, los mismos ojos y la misma caradesde la última vez que los había visto. Anoté apuntes resumí e hice algunas actividades, cuando no entendía algún ejercicio le preguntaba al profesor, pero no me respondía.
Hubo un recreo en elque sentí la necesidad de hablar con mis amigos, me habían ignorado durante los tres meses de vacaciones, así que me acerqué a hablarles pero se voltearon como si no quisieran escucharme. No me...
Regístrate para leer el documento completo.