cuentoo

UNA VIDA CON PROPÓSITO

Detenerse un momento y dejarse envolver por la magia y encanto de la Luna hace que cada una de mis noches sea diferente, el poder elucubrar las acciones que nos ponemos como retos y tareas a diario, la forma en la que resolvemos conflictos o en la que tratamos de dar solución a los mismos, en la que soñamos y disfrutamos al imaginar que podemos alcanzar y poseertodo lo que anhela nuestro corazón hace que sienta que las noches sean cortas y que el tiempo cronológico no esté a mi favor mientras pueda meditar en las interrogantes que se encuentran dentro de mí, quizá el sol se asome con sus rayos por aquella ventana en la que diariamente puedo observar los dominios y la extensión de la naturaleza, quizá el día me sorprenda soñando despierta, pero aquí estoyyo, siempre a la misma hora y esperando a aquella hermosa Luna que me transportara a un mundo paralelo al que vivo, aplazando un poco el tiempo que me concede la noche.
A veces pienso en el tiempo que pasan las personas anhelando cosas que no poseen, tiempo que dejan pasar a diario, el mismo que se les agota con los años mientras la vida pasa frente a ellos, aquellos que solo sueñan de noche yolvidan soñar también de día, es muy hermoso poder rendirnos cuenta a nosotros mismo de lo que hicimos en el día, levantarnos con un propósito y que al llegar la noche tengamos la satisfacción de que pudimos concluirlo o que dimos el máximo de nosotros para poder realizarlo, eso nos asegura una victoria interior, la satisfacción propia y sentirnos realizados sonriéndole a la vida diariamente,despertando cada mañana con ganas de vivir .
Hoy me encuentro sentada frente a la pantalla de un computador, dentro de una habitación muy amplia y en uno de los mejores lugares en los que podría estar, un hospital, dando marcha a una de mis más grandes metas, terminar mi carrera profesional y ser Doctora, comparto con niños y adultos la mayor parte del día, sintiéndome identificada con cada uno deellos, pero en los últimos meses estudie el caso de Daniela una adolescente de 13 años, quien despertó en mi un sentimiento especial desde el primer momento en que la vi, recuerdo muy bien aquel día, estatura mediana y contextura delgada, cabello corto y de color negro, tez canela, pómulos anchos y mejillas pronunciadas, ojos negros grandes como dos luceros, características que hacían quetodo en ella transmita armonía y confianza, llevaba en manos un libro, una de las cosas que más me impresiono fue su mirada profunda y su sonrisa persistente.
Durante muchos días la observe, note que sentía afición por la lectura, le agradaba sentarse en el jardín rodeada de flores y leer un libro, siempre a la misma hora, aquellas tardes parecían interminables para ella, sonreía mientras pasabalas paginas, perdía la mirada en aquellas líneas, horas después se disponía a seguir su tratamiento, al observarla con la misma sonrisa, aquella sonrisa persistente que mantenía desde el primer día en que la vi, me hacía pensar que el libro que poseía era “mágico”, que hacia volar su imaginación, libro cuyo título desconocía pero que deseaba tener entre mis manos. Daniela solo se relacionabacon pacientes de su edad, familiares y médicos, yo era una persona ajena a su entorno, realizaba mi internado en otras áreas del hospital, muchas veces deseaba acercarme a ella y poder hablarle, pero algo en mi me detenía, pensaba que tal vez la incomodaría, fue así como pasaron los días y semanas, nos encontrábamos todas las tardes siempre a la misma hora, ella en el jardín leyendo aquellibro cuyo título aun me era desconocido y yo esperando con afán detrás de aquel vitral, desde un punto en el que no podría observarme. Me eran muy agradables aquellas horas, el ambiente tranquilo, el aire fresco y la brisa suave que permitía desprender los aromas dulces de las flores que nos rodeaban, a pesar de no estar junto a ella, sentía que de alguna manera podía hacerle compañía....