Cuentos Y Otros
El señor Epidídimus, el magnate de las finanzas, uno de los hombres más ricos del mundo, sintió un día el vehemente deseo de visitar el barrio donde había vivido cuando era niño y trabajaba como dependiente de almacén.
Le ordenó a su chofer que lo condujese hasta aquel barrio humilde y remoto. Pero el barrio estaba tan cambiado que el señor Epidídimus no lo reconoció. En lugarde calles de tierra había bulevares asfaltados, y las míseras casitas de antaño habían sido reemplazadas por torres de departamentos.
Al doblar una esquina vio el almacén, el mismo viejo y sombrío almacén donde él había trabajado como dependiente cuando tenía doce años.
-Deténgase aquí. -le dijo al chofer. Descendió del automóvil y entró en el almacén. Todo se conservaba igual que en la épocade su infancia: las estanterías, la anticuada caja registradora, la balanza de pesas y, alrededor, el mudo asedio de la mercadería.
El señor Epidídimus percibió el mismo olor de sesenta años atrás: un olor picante y agridulce a jabón amarillo, a aserrín húmedo, a vinagre, a aceitunas, a acaroína. El recuerdo de su niñez lo puso nostálgico. Se le humedecieron los ojos. Le pareció que retrocedía enel tiempo.
Desde la penumbra del fondo le llegó la voz ruda del patrón:
-¿Estas son horas de venir? Te quedaste dormido, como siempre.
El señor Epidídimus tomó la canasta de mimbre, fue llenándola con paquetes de azúcar, de yerba y de fideos, con frascos de mermelada y botellas de lavandina, y salió a hacer el reparto.
La noche anterior había llovido y las calles de tierra estaban convertidasen un lodazal.
Problemas económicos, sociales, habitacionales y de vínculos
En las sociedades preindustriales los ancianos seguían realizando tareas útiles mientras podían.
Los países industrializados se enfrentan con tres problemas:
1. Los sistemas actuales de trabajo no tienen tareas que ofrecer cuando los individuos pierden sus energías.
2.
3. Es cada vez mayor el numero depersonas que salen de la etapa productiva antes de considerárselos ancianos.
4. Las familias no pueden hacerse cargo de los mismos por razones económicas y de espacio habitacional.
Todos estos problemas causan la marginación de los ancianos, pues la sociedad considera al hombre un poco por lo que hace y produce y no por lo que es.
En países ricos y altamente especializados han surgido modernoscentros residenciales para ancianos con asistencia medica y psicológica de vanguardia, con jardines, centros recreativos, talleres, etc.
Estas podrían ser soluciones pero no debemos olvidar que es necesario dar al anciano además de asistencia y confort un ambiente familiar y humano, que no es fácilmente reemplazable.
Muchos de los cambios que se están produciendo son inevitables pero es necesariocompatibilizar las modificaciones de las estructuras sociales y la planificación de los servicios de salud y asistencia social que permitan la atención de las necesidades de la familia y de sus miembros.
La sociedad moderna esta impregnada de materialismo y el trabajo es considerado como productividad y no como formación humana.
5. Instituciones al servicio de la ancianidad
1. HogaresGeriátricos, de orden estatal o privado, acogen a los ancianos de día o como internos. Reciben atención médica, espiritual, laborterapia y recreación. Están destinados a ancianos sanos (en algunos, mixtos, pueden vivir matrimonios).
2. Clínicas Geriátricas, con iguales características, están dedicadas a la atención del anciano enfermo o postrado. Cuentan con médicos especialistas, kinesiólogos, foniatras,terapeutas ocupacionales, enfermeras y demás.
3. Clubes de la tercera edad, se ofrecen como ámbitos de paz y serenidad; los ancianos participan de "charlas", conferencias, paseos, bailes, coros, juegos, con alegría comunicativa y sincera.
6. Más sabe el diablo por viejo...
Hoy día, más personas de la tercera edad luchan por mantenerse activos dentro de la vida moderna, siendo útiles a la...
Regístrate para leer el documento completo.