Cuentos
Era tan blanco como la nieve de Noruega y sus cabellos, rojizos y largos hasta por debajo de susposaderas. Sus ojos, eran los más hermosos y raros que he visto hasta ahora, son medios verdesazulados, era un gran músico y su carrera como cantante estaba surgiendo poco a poco. Semanalmente me llevaba albar de su mejor amigo y me cantaba canciones de su banda y covers de otros artistas. Y claro, nuestra canción era “wonderwall” de Oasis. Siempre recordaré ese día tan inesperado, él estaba cantandonuestra canción, cuando de pronto a la mitad de la melodía paró de cantar y al frente de todos me dijo que me amaba y que cada vez que me veía, se inspiraba para escribir una canción, y que cuandocaminaba por la calle y pensaba en mí, sonreía y los demás lo veían raro, pero a él no le importaban los demás, sino solo yo. Cada día me enamoraba con sus detalles, era muy romántico a pesar de suapariencia algo alocada, ante los ojos de los demás, nadie pensaría que él sea muy detallista. Y claro, las apariencias siempre nos van a engañar, y usualmente nunca vemos más allá de lo evidente.
Sé quetodas o la gran mayoría decimos “él es diferente” y sí, esta vez va en serio, él fue muy diferente a todos.
Hablábamos a diario de cualquier tema, empezábamos con ovnis y terminábamos debatiendo sobrelos problemas que tenían ciertas ciudades. Éramos raros, normalmente nadie nos entendía, bueno sí, nuestros mejores amigos, aunque ellos también nos decían que estábamos locos.
Cuando salíamostemprano de la universidad, nos encantaba ir al Parque La Pera del Amor, es un lugar tan relajante y con una vista hermosa hacía el mar, sin darte cuenta las horas pasan muy rápido. Las veces que iba allíera con Edgar, siempre pensábamos en nuestro futuro, si seguiríamos juntos, como nos lo prometíamos a diario, para siempre y por siempre, es algo cliché y cursi, pero estábamos tan enamorados que no...
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