Cuerpo, Terror, Abyección.
Ide@s CONCYTEG, Año 3, Núm. 36, 5 de junio de 2008
Las formas singulares del cuerpo
Cuerpo, terror, abyección
Roberto Manero Brito 1
victimizado no nos remiten únicamente a su particularidad histórica, a su biografía (aún en el caso en el que las víctimas pudieran ser designadas colectivamente), sino que se constituyen también como signo y como
I
símbolo, comosigno de un lenguaje macabro y horroroso, como símbolo social
El
cuerpo de las víctimas es uno de los
de
un
prestigio
asignado
de
manera
elementos que producen más inquietud tanto en los estudiosos como en la sociedad en general. Los investigadores de la
proporcional a la intensidad del sufrimiento vivido. El cuerpo victimizado puede ser, en su momento, el cuerpo delterror, el cuerpo que es testigo impotente de un horror que lo invade, que se sabe objeto de una serie de estrategias inescapables cuyo resultado será su anonadamiento, su reducción en el reino animal y mineral. Es un cuerpo que sufre el terror, pero que también lo produce. Es la ambigüedad trágica de la materialidad de este cuerpo sufriente. El pathos griego, el desollamiento, el desmembramiento,la
problemática de la violencia encuentran en los procesos de constitución de la figura de la víctima uno de los ejes fundamentales en los cuales dicha problemática engarza su eficacia. Sin embargo, en su
conceptualización, la víctima va perdiendo algo, el estudio de la víctima es lo que más se parece a la doble victimización que las intelectuales feministas detectaron con suma lucidez. Losprocesos jurídicos, así como los dispositivos de investigación se constituyen como espacios de violentación de las víctimas del delito, especialmente de
reducción a cenizas, todos estos suplicios dejan una marca indeleble, no sólo en la materialidad del cuerpo supliciado, sino básicamente en la memoria colectiva, en la capacidad de representarse el horror y el terror en las sociedades. Elterror cuenta, entonces, con un sustrato de materialidad que no es
aquellas víctimas de delitos que producen un daño corporal.
1
Doctor en Ciencias de la Educación. ProfesorInvestigador del Departamento de Educación y Comunicación, Universidad Autónoma Metropolitana-Xochimilco. Miembro del Sistema Nacional de Investigadores. Email: mabr3005@correo.xoc.uam.mx .
únicamente una tecnología socialpara 56
ISSN en trámite
Ide@s CONCYTEG, Año 3, Núm. 36, 5 de junio de 2008
producción de dolor y sufrimiento, sino que se estructura a la manera de un gran espejo que nos devuelve el rictus característico del pathos social que nos envuelve, imagen visual y auditiva, formas sensoriales y táctiles que nos remiten a lo irremediable de una situación donde el encierro, donde lainescapabilidad son sus características más evidentes. El cuerpo supliciado, el cuerpo del terror que habita en las pesadillas propias de cada sociedad. El proceso del terror convierte la lógica cartesiana en un juego que pierde su sentido. Allí, en el terror, el sujeto y el objeto se confunden, copulan
recuerda el experimento de Laing, que nos propone bebernos nuestros propios buches de agua…), nuestrosdeshechos, nuestra propia reducción a la animalidad, al reino mineral. En el Diario de un ladrón, Jean Genet relata algunas de las humillaciones sufridas, pero especialmente el verdadero desdoblamiento subjetivo que sigue a la vergüenza una vez que se acata y se asume el lugar asignado por el victimario. Empieza, en la singularidad de la abyección, una posibilidad de resistencia que surge en elcontexto mismo de la inescapabilidad del terror. El resistente, la víctima, reconoce en su condición abyecta su grandeza, y es allí donde el terror se revierte sobre todas las figuras, incluyéndola, incorporando a la víctima en el siniestro juego imaginario de la violencia extrema.
indefinidamente produciendo formas de encantamiento y de emoción, que muestran resortes profundos que van mucho más...
Regístrate para leer el documento completo.