Cárceles De Brasil
La población penitenciaria alcanzó en 2011 una cifra de alrededor de 500.000 reclusos, el 44 por ciento de los cuales estaba en prisiónpreventiva. El grave hacinamiento, las condiciones degradantes, la tortura y la violencia entre reclusos eran habituales.
En febrero, en el estado de Maranhão, murieron seis reclusos –cuatro de loscuales fueron decapitados– en un motín que estalló como protesta por el hacinamiento imperante en la Delegación Regional de Policía de Pinheiro, donde había 90 detenidos en una celda destinada a 30. Segúnel colegio de abogados del estado, se elevó a 94 el número total de reclusos fallecidos bajo custodia en el estado desde 2007.
La Comisión Interamericana considera que esta realidad estacionaria esel resultado de décadas de desatención del problema carcelario por parte de los sucesivos gobiernos de los Estados de la región, y de la apatía de las sociedades, que tradicionalmente han preferido nomirar hacia las cárceles. Así, los centros de privación de libertad se han convertido en ámbitos carentes de monitoreo y fiscalización en los que tradicionalmente ha imperado la arbitrariedad, lacorrupción y la violencia
Si bien el Estado se encuentra en una posición especial de garantizar frente a las personas privadas de libertad, y que como tal, asume deberes específicos de respeto ygarantía de los derechos fundamentales de estas personas; en particular, de los derechos a la vida y a la integridad personal, cuya realización es condición indispensable para el logro de los fines esencialesde la pena privativa de libertad: la reforma y la readaptación social de los condenados. Para que , el ejercicio del poder de custodia lleve consigo la responsabilidad especial de asegurar que laprivación de la libertad sirva a su propósito y que no conduzca a la violación de otros derechos básicos ¿si este es el fin del estado entonces porque no se compromete en realidad a cumplirlo ni a...
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