Daniela

Últimamente he observado con frecuencia como salen a flote numerosos casos de muertes debido a la cirugía estética en Venezuela, y es que estas operaciones que se han vuelto tancomunes en nuestro país pueden convertirse en actos mortales debido a la falta de información de esos desesperados pacientes que ansían moldear su cuerpo.
Sé que es normalpara todos tener conocidos que se hayan realizado algún cambio estético o incluso habernos realizado uno de estos, pero, ¿Qué nos lleva a realizar esta acción vanidosa e inclusopeligrosa?; Miriam Carvajal, hace 7 años y con tan solo 28 años de edad, fue una de estas personas que decidió modificar su figura, agrandando su busto y realizándose una liposucción deabdomen, esta víctima del bisturí afirma que no se sentía a gusto al verse al espejo antes de someterse a la operación, lo que la llevó a gastar sus ahorros para satisfacer un deseoque para muchos resulta superficial; al parecer la presión social y el efecto de los medios han sido los principales factores determinantes para que tantas mujeres decidan introduciren su cuerpo sustancias ajenas a él.
Miriam, como muchas otras, fue una de esas mujeres que cedió ante la demanda social, y aunque hasta ahora no ha sufrido efectos secundariospor las alteraciones en su cuerpo, cuenta que luego de ver tantos casos que han terminado en tragedia, si tuviese que tomar de nuevo la decisión de operarse, preferiría decirle noal bisturí y aceptar la figura que Dios le dio.
Hay quienes han corrido con suerte, otros han pagado con su vida el deseo de ser perfectos, pero sin duda las cirugías plásticasson un tema que debemos tomar en serio y analizar un poco más si de verdad vale la pena dar nuestra vida por un deseo tan carnal o amar lo que por naturaleza se nos ha dado.