De la mano de nasa

VIAJANDO DE LA MANO DE ‘NASA’
La narración es un arte tan antiguo como el ser humano, decía Andrés Bello. Ciertamente la riqueza y la construcción de historias, la formación de la identidad de pueblos enteros tiene su origen en la tradición oral, transmitida de generación en generación.

En su constitución encontramos la riqueza que permite a una cultura definirse y diferenciarse de la otra yaunque generalmente se cree que la historia se encuentra consignada en los libros, realmente nace de la interacción de seres humanos con valores, ideas, sentimientos y pensamientos transmitidos a través de la palabra, antes de plasmarse por escrito.

Cuentero es entonces aquella persona que no solamente se dedica a “contar el cuento”, sino que con sus narraciones comunica, es decir, serelaciona con quien lo escucha, conmueve a su interlocutor, lo hace reflexionar, pensar, reír, llorar, le permite expresar desde el pensamiento más profundo, hasta la ocurrencia más extraña, le permite exteriorizar emociones guardadas y recordar su pasado; pero sobretodo, le da la oportunidad de creer que todo se puede cambiar si se esfuerza en soñar, en creer en ese vehículo de ilusiones queacompañada de acciones puede alimentar la esperanza de que todo puede ser diferente: la palabra.

Estos soñadores, estos creadores de mundos alternos y terrenales con elementos surreales, estos maestros de la palabra y forjadores de sonrisas, llegaron a Bogotá hace más de 20 años, por influencia cubana y española y su escucha fue acogida por los jóvenes como un “hobbie”, fue una actividad reservada deun círculo muy cerrado hasta hace poco tiempo, cuando lentamente las personas de las diferentes localidades se fueron enterando de este bello arte, al que paradójicamente pasó a denigrársele por su carácter público e incluyente.

El primer espacio de cuentería nació en el Chorro de Quevedo, en la localidad de La Candelaria, dado que este fue y ha sido un lugar de difusión de la cultura y lasideas jóvenes durante muchos años. Después de ese, nacieron muchos lugares en los que la gente se reunía horas y horas para escuchar a sus cuenteros favoritos y cualquier lugar al aire libre se convirtió en escenario de las más intrépidas historias y profundos deseos del corazón.

Fue así como dos cuenteros, hijos del Chorro de Quevedo, lugar en el que lentamente se iba volviendo más complicadoejercer su pasión (debido a la fama de forma de ‘rebusque’ en que se convirtió su práctica y que desencadenó una serie de redadas de la Policía destinadas a recoger a todos aquellos vendedores ambulantes y trabajadores informales, sin descontar a posibles ladrones que aprovecharan este espacio para cometer sus fechorías) durante una visita al centro interactivo Maloka, en Ciudad Salitre, en el año2002, decidieron crear su propio lugar para dejar volar la imaginación: Ricardo Quevedo y Edwin Castiblanco, actualmente más reconocidos por sus apodos: ‘Richie’ y ‘Bart’, fueron los dos creadores del espacio de cuentería más grande la ciudad: NASA (Narradores de Salitre).

Pero…¿quiénes eran estos personajes inquietantes que un día decidieron crear este espacio de narración al aire libre quehoy por hoy, cada fin de semana y desde hace siete años, convoca a miles de personas en torno a un ser que transmite su interioridad?
Ricardo Quevedo es un manizalita, estudiante de Comunicación Social, enamorado de la vida y estudioso compulsivo del lenguaje y las formas de expresarnos porque según él, la mayoría del tiempo nos expresamos de manera incorrectas, es el “tierno” y a la vez“malgeniado” del grupo: “es que a mi me dicen: ¡ah, Ricardo, es que usted es más rabón! y yo les respondo: ¡yo no soy rabón! ¡es que tengo las cejas muy pobladas!”.

Su estilo es mordaz y sarcástico. Es el cuentero que más público convoca los fines de semana, por todo lo que de paternal y rebelde tiene. Básicamente se dedica a narrar las desdichas y el desespero del ciudadano de a pie: “me interesa...