DE LA PARRA La chilenidad

www.teatroenlinea.150m.com - Revista digital de las Artes Escénicas- No.3 (Junio, 2005)

LA “CHILENIDAD” EN EL TEATRO Y LOS VATICINIOS DE CASANDRA
(Alejandro Sieveking y Marco Antonio de la Parra)
Costaz Palamides
Grupo Teatrela - Venezuela
Recibido el 22 Septiembre 2004, aceptado el 20 Mayo 2005.

Introducción. Antes de escribir “Pequeños Animales Abatidos” en su exilio en Costa Rica, y que lehace merecedor del Premio Casa de las Américas 1975, ya Alejandro Sieveking (1934) había
transitado por un quehacer prolífico, constante y contundente en el teatro chileno desde 1955. Por
eso no extraña que esa obra, epílogo terrible para un Chile libertario siga siendo su última obra.
Tres años más tarde, Marco Antonio de la Parra irrumpe con dos obras que lo lanzan al ruedo teatral
de Chile.Pareciera que donde acaba el primero continua el segundo. Y sin embargo no sólo allí se
vislumbran continuidades y coincidencias.
La primera obra de Sieveking “ Encuentro con las sombras” fue estrenada en 1955 en el
Primer Festival de Teatro de Aficionados de la Universidad de Chile donde cursaba estudios de
Arquitectura. Mas tarde, abandona esos estudios para matricularse en la Escuela de Teatro dela
Universidad de Chile sin abandonar su apego a las artes plásticas ejerciendo muchas veces la labor
de escenográfo y figurinista a la par que su carrera de dramaturgo
Según César CECI, “Sieveking respeta en primer lugar la verdad interior del hombre. En
este sentido, es un realista.”. Más adelante el ensayista define las diferentes vertientes del realismo
de Sieveking : realismo psicológico dondedestaca “Parecido a la felicidad” y “La madre de los
conejos”, realismo crítico donde se ubicaría a “Tres tristes tigres”, “Dionisio” y “Peligro a cincuenta
metros” y realismo poético donde inserta a “La mantis religiosa”, “Animas de Día Claro” y “El
Cherube”. Habría que agregar la tendencia folklorista del autor en estas dos últimas obras y que
alcanza un gran éxito con “La remolienda” escritaen 1965 y donde mezcla sus tres formas de
realismo en un sainete pleno de humor y ambiente campesino en donde se eleva sin duda, el
género ahondando sus posibilidades estéticas. La acción ocurre en un prostíbulo donde una viuda

campesina llega con sus tres hijos solteros creyendo que es un hotel respetable. Su confesión de que
el motivo de su viaje al pueblo es encontrar esposas para sus hijospone manos a la obra a las tres
jóvenes del burdel. Esto ocasiona un sinfín de enredos, equívocos y coincidencias y al final los
campesinos ya enamorados perdonan la componenda y todos vuelven al campo felices no sin antes,
una de ellas, tirar los zapatos de tacón alto y caminar descalza por el campo. Sin embargo
Sieveking manifiesta en una entrevista que “Animas de día claro” (1963) es la mejor desus obras
“porque crea un universo propio”.
Según la creencia popular, las ánimas no pueden irse al descanso eterno si tienen algún gran
deseo que no se cumplió en vida y permanecen en este mundo asustando a los vivos. Con esta
premisa, Sieveking cuenta la historia de las ánimas de cinco hermanas, muertas hace años, que
habitan una casona de campo abandonada. Una tras otra van satisfaciendo susnaturales y cándidos
deseos y se elevan al cielo. Pero la menor, espanta a los posibles novios y es así como ocultando un
lunar aparece en la figura de sus 20 años ante un joven del pueblo en busca de un beso. Pero no se
va de este mundo, quiere algo más que el beso. El enamorado joven promete juntarse con ella en el
cielo y así ella se reunirá por fin con sus hermanas. Víctor Jara, el director quemontó la obra,
recalca en el programa que ésta es una “historia de nuestro pueblo. De este pueblo, que en todas
sus manifestaciones, aún en las más trágicas, introduce elementos graciosos y hasta divertidos.”
En “Tres tristes tigres” la realidad aparece bajo un prisma de análisis sociológico y aún
moral; pero estos últimos aspectos no alteran el profundo respeto que a Sieveking le merece la...