De los delitos y de las penas
Páginas: 6 (1409 palabras)
Publicado: 22 de febrero de 2011
Capítulo 36
De la costumbre de poner precio a la cabeza de un reo
Cuestiona el autor la antigua práctica de ofrecer recompensa por la vida o captura de un reo argumentando que la misma produce una usurpación de la autoridad y que además se dan muestras de debilidad política ya que “quien tiene la fuerza para defenderse no la busca”, además de que esta acción atenta contra la buena fe yconfianza recíproca que deben profesar los miembros de una sociedad entre sí.
Capítulo 37
Tentativas, cómplices, impunidad
La intención como posible inicio de actos delictivos es señalada como objeto de sanciones, calificando como acto punible la voluntad manifiesta de delinquir y la complicidad como acto menor a la ejecución del delito. Partiendo de esta diferenciación ataca al sistema deese entonces que ofrecía impunidad a los cómplices que delataban a sus socios.
Con una marcada estima a la moralidad y a los valores arremete contra la traición, descalificándola como medio para evadir las leyes al sepultarla con la frase “detestable aún entre los malvados”.
Un Tribunal no debe por tanto mostrar debilidad al implorar el socorro de quien ofende las leyes, siendo este capítuloun pronunciamiento con respecto a los colaboradores de delitos que impregna a la ley de la majestuosidad que requiere para colocarse fuera del alcance de quienes atentaron contra ella.
Capítulo 38
Interrogatorios sugestivos y deposiciones
Respecto al desarrollo de los procesos penales el autor expresa, en este capítulo, su opinión respecto a la forma como deben realizarse losinterrogatorios, haciendo crítica a formas sugestivas de aplicarlos ya que éstos no deben, en ningún momento, sugerir al reo una respuesta en particular que lo condene o lo libre de la acusación.
Nos refleja una máxima referente a la administración de justicia, la imparcialidad y el evitar por todos los medios influir en su desenlace, mencionando la tortura como equivalente físico de lo sugestivo ya que lamisma representa una forma de inculpar a una persona que quizás para librarse del dolor asuma una culpa o para evitar una pena mayor resista en total silencio.
Es por tanto este Capítulo el relato de su opinión respecto a la correcta forma de interrogar y a la obligación que sujeta al reo de responder, siempre condenando la tortura como medio para facilitar la aplicación de la ley.Capítulo 39
De un género particular de delitos
Beccaria dirige su atención hacia las atrocidades humanas de su época, los crueles acontecimientos que eran práctica común en la aplicación de penas, trasportándose al génesis de las motivaciones que dieron vida a su obra “la crueldad y la anarquía legalizada”. Sin ahondar en estas prácticas hace mención de los delitos que derivan de la naturalezahumana y del pacto social, ese que nos enseña Rousseau en su Contrato Social y que hacen coincidir su filosofía: el bien común, el orden social es algo inestimable en valor para la vida política y social y por ende merecen especial atención.
Capítulo 40
Falsas ideas de utilidad
En Falsas ideas de utilidad arremete contra los legisladores que dan vida a las leyes que pretendiendo tener un finde utilidad general se convierten en disposiciones particulares que se aplican al colectivo.
Cita el ejemplo de las leyes que prohíben armas ya que “no desarman más que a los no inclinados a cometer delitos”.
Analizando su planteamiento resulta lógico el hecho de que un individuo presto a cometer graves delitos no va a detenerse ante una ley que le prohíba el uso de armas bajo la amenaza deuna pena menor a la que genera el acto en sí.
Condena estas falsas ideas de utilidad con una aseveración ideal en este contexto al llamar a estas leyes “no preventivas sino asustadas por el delito”.
Capítulo 41 Cómo se evitan los delitos, 42 De las ciencias, 43 Magistrados, 44 Recompensas y 45 Educación.
Cómo se evitan los delitos es una acertada opinión respecto al objeto preventivo...
De la costumbre de poner precio a la cabeza de un reo
Cuestiona el autor la antigua práctica de ofrecer recompensa por la vida o captura de un reo argumentando que la misma produce una usurpación de la autoridad y que además se dan muestras de debilidad política ya que “quien tiene la fuerza para defenderse no la busca”, además de que esta acción atenta contra la buena fe yconfianza recíproca que deben profesar los miembros de una sociedad entre sí.
Capítulo 37
Tentativas, cómplices, impunidad
La intención como posible inicio de actos delictivos es señalada como objeto de sanciones, calificando como acto punible la voluntad manifiesta de delinquir y la complicidad como acto menor a la ejecución del delito. Partiendo de esta diferenciación ataca al sistema deese entonces que ofrecía impunidad a los cómplices que delataban a sus socios.
Con una marcada estima a la moralidad y a los valores arremete contra la traición, descalificándola como medio para evadir las leyes al sepultarla con la frase “detestable aún entre los malvados”.
Un Tribunal no debe por tanto mostrar debilidad al implorar el socorro de quien ofende las leyes, siendo este capítuloun pronunciamiento con respecto a los colaboradores de delitos que impregna a la ley de la majestuosidad que requiere para colocarse fuera del alcance de quienes atentaron contra ella.
Capítulo 38
Interrogatorios sugestivos y deposiciones
Respecto al desarrollo de los procesos penales el autor expresa, en este capítulo, su opinión respecto a la forma como deben realizarse losinterrogatorios, haciendo crítica a formas sugestivas de aplicarlos ya que éstos no deben, en ningún momento, sugerir al reo una respuesta en particular que lo condene o lo libre de la acusación.
Nos refleja una máxima referente a la administración de justicia, la imparcialidad y el evitar por todos los medios influir en su desenlace, mencionando la tortura como equivalente físico de lo sugestivo ya que lamisma representa una forma de inculpar a una persona que quizás para librarse del dolor asuma una culpa o para evitar una pena mayor resista en total silencio.
Es por tanto este Capítulo el relato de su opinión respecto a la correcta forma de interrogar y a la obligación que sujeta al reo de responder, siempre condenando la tortura como medio para facilitar la aplicación de la ley.Capítulo 39
De un género particular de delitos
Beccaria dirige su atención hacia las atrocidades humanas de su época, los crueles acontecimientos que eran práctica común en la aplicación de penas, trasportándose al génesis de las motivaciones que dieron vida a su obra “la crueldad y la anarquía legalizada”. Sin ahondar en estas prácticas hace mención de los delitos que derivan de la naturalezahumana y del pacto social, ese que nos enseña Rousseau en su Contrato Social y que hacen coincidir su filosofía: el bien común, el orden social es algo inestimable en valor para la vida política y social y por ende merecen especial atención.
Capítulo 40
Falsas ideas de utilidad
En Falsas ideas de utilidad arremete contra los legisladores que dan vida a las leyes que pretendiendo tener un finde utilidad general se convierten en disposiciones particulares que se aplican al colectivo.
Cita el ejemplo de las leyes que prohíben armas ya que “no desarman más que a los no inclinados a cometer delitos”.
Analizando su planteamiento resulta lógico el hecho de que un individuo presto a cometer graves delitos no va a detenerse ante una ley que le prohíba el uso de armas bajo la amenaza deuna pena menor a la que genera el acto en sí.
Condena estas falsas ideas de utilidad con una aseveración ideal en este contexto al llamar a estas leyes “no preventivas sino asustadas por el delito”.
Capítulo 41 Cómo se evitan los delitos, 42 De las ciencias, 43 Magistrados, 44 Recompensas y 45 Educación.
Cómo se evitan los delitos es una acertada opinión respecto al objeto preventivo...
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