De los votos

DE LOS VOTOS DE
CASTIDAD POBREZA Y OBEDENCIA

DE LAS CONSTITUCIONES:

Art. 5
Con la profesión de castidad, pobreza y obediencia, viviendo en conformidad al espíritu de la Congregación, las Misioneras de la Pasión de N.S.J.C., lleven a cumplimiento su consagración bautismal y en respuesta a la Divina Llamada, se pongan totalmente al servicio de Dios, amado sobre toda cosa. (cfr. LG44). En fuerza de este pacto de alianza con Dios, toda su existencia se convierte en un continuo sacrificio ofrecido a Dios en la caridad.

Art. 7
7.1 Por medio de la profesión religiosa las hermanas son consagradas a Dios mediante el ministerio de la Iglesia y vienen incorporadas a la Congregación de las Misioneras de la Pasión de N.S.J.C. con los derechos y deberes definidos por el derechocomún y particular.
7.2 Todavía las hermanas no deben solo observar fielmente e integralmente los Consejos Evangélicos, sino que también deben modelar la propia vida a estas Constituciones y a las otras leyes propias de la Congregación, tendiendo así a la perfección de su estado.

CASTIDAD

Art. 8
El consejo evangélico de castidad, asunto para el reino de los cielos (Mt 19,21), que es signo delmundo futuro y fuente de una más rica fecundidad del corazón indiviso, comporta la obligación de la perfecta continencia en el celibato.

Por lo tanto las hermanas están obligadas (o comprometidas) a abstenerse, por un nuevo título, de cualquier acto interno y externo que sea opuesto a la castidad.

Con el fin de custodiar el don de la castidad, las hermanas se valgan de todos los mediosrecomendados de la Iglesia y observen fielmente las normas establecidas en los Estatutos de la Congregación.

De los estatutos:

Art. 3
La virtud de la castidad en las Misioneras de la Pasión de Jesús, con el socorro de la divina gracia debe tender a la máxima perfección, como esposas de Aquél que se pace (apacienta, pastorea) entre los lirios; y para continuar aquí en la tierra la divina misióndeben empeñarse a evitar cada acción, palabra, mirada, pensamiento, afecto que se oponga a esta angélica virtud. Por consiguiente:
- No lean, antes alejen de la comunidad cualquier hoja, figura o cualquier otro que sepa de frívolo o mundano.
- Eviten amistades particulares, que son de tanto y serio peligro para la bella virtud.
- Tenga una santa y digna reserva con todos.
En lasrelaciones con parientes u otras personas demuestren suma reserva (discreción, prudencia), evitando aunque prolongados discursos, recordando siempre que está prohibido retenerse en lugares cerrados, fuera de la vista de los demás. Eviten todo aquello que pueda disminuir la serenidad reflejada de la paz que goza el alma que mira y siente la presencia de Dios en todas las cosas y personas.

Paracuidar la pureza de mente y de corazón es necesaria aunque la limpieza del cuerpo;
en cada cosa limpieza y orden pero sin llegar a la vanidad, como debe ser una persona consagrada a Dios.

POBREZA

Art. 9
El consejo evangélico de la pobreza, a imitación de Jesucristo, que siendo rico se hizo pobre por nosotros, más allá de una vida pobre de hecho y de espíritu que nos conduce a una activasobriedad dejando las riquezas terrenas; conlleva a la dependencia y a la limitación en el usar y disponer de los bienes, según el derecho propio de la Congregación.

Con el voto de pobreza las hermanas renuncian al derecho de usar y disponer de cualquier cosa temporal sin el permiso de los legítimos Superiores.

La virtud religiosa de la pobreza requiere aunque que cada cosa, ya sea de lapropia hermana o de la Congregación, sea administrada y usada en lo estrictamente necesario, en modo de evitar cada superfluidad y se de preferencia a aquello que es menos precioso (apreciable) y apenas suficiente a la necesidad de la persona y de la Comunidad.

De los estatutos:

Art. 4
El voto religioso de pobreza es necesario, y conforme al consejo de Nuestro Señor Jesucristo para ser...