De mis tardes gallegas en plaza españa parte 3
Tras servir la ultima copa, en tono alegrón dejo escapar unarisa casi burlona, casi coqueta, casi sin sentido, la copa estaba tan llena que cualquier inexperto había confundido su contenido con gelatina sin sabor, y tras un breve silencio, ya sin tonoscordiales y una mirada mas fría que diez mil inviernos, me dijo..- bueno creo que sos de los que prefiere el verano o el calor antes que el frío... - ¿perdón? - era tarde ya ardían mis ojos por ese malditocrepúsculo marchito, ella se marchaba como llego y sin saber como alimentar sus pobres críos...
(continua)
Y sin ninguna respuesta mas que el andar hacia donde me conducían mis botas, esquivandoborrachos, borrachos de estupidez, adinerados bolsillos y vacíos pensamientos por las calles (no es que tenga algo contra los borrachos) asfixiados por el misero humor que brota desde "10 años delciclo rosa" hablando de su miseria sexual tal como los mas bajos mendigos de la clase pudiente colombiana; y la chaqueta de pordiosero con que me camuflo entre la gente normal sale a relucir frente auna prostituta (una mujer de alrededor 40 años) que me confunde por "petrolero" (quiza minero... y recien salido de lo profundo de las minas de zipaquira) nombrando una susecion de acciones al parecersalidas de dicho evento; y en lo basico de su degradación humana por miserables cinco mil pesos(COP, aclaro, no es la grandeza económica), quien me observa con tres expresiones diferentes que datandesde lo mas profundo de su "trabajo" hasta lo mas humilde de su humanidad; ¿como una madre de familia alimenta a sus hijos sin titulo bachiller?, caso que me remonta (si, como una cometa) a alguna...
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