De Necesidades Culturales y Cultura Necesaria
Por Raúl Albanece Las necesidades que pretenden satisfacer las políticas culturales son de difícil definición, de más difícil consenso y generalmente no alcanzan a expresarse en demandas claras. A diferencia de las necesidades de salario, salud, educación, vivienda, sobre las que contamos con criterios estandarizados más o menos discutibles quepermiten objetivar las demandas, nos encontramos aquí con verdaderas discusiones bizantinas. Como necesidades que refieren a nuestra diversidad creativa privilegian muy distintos dominios que nos enfrentan y nos unen en un mismo conflicto. En tal sentido son necesidades que requieren de una especial atención de parte del gobierno para ser definidas y atendidas satisfactoriamente. Esta época deelecciones puede ser buen momento para poner sobre la mesa cual debiera ser el sentido de las políticas culturales de cara a la economía cultural a la que hicimos referencia en la nota anterior. Una política cultural no es tal si no tiene posibilidades de ser puesta en funcionamiento, y esto tiene que ver con que hayan sido elaboradas las vías por las cuales se va a financiar esta política. Es interesanteseñalar que entidades claramente situadas en el espacio de la economía, y más particularmente de las finanzas, como el BID y FMI hace tiempo que vienen sosteniendo que "la cultura cuenta", esto es, forma parte de las cuentas. Aquí entramos de lleno en una línea de pensamiento sobre la cultura que no sólo no la opone a la economía sino que diluye los límites entre ambos dominios, y hasta concibe ala cultura como un sector económico. Es decir, se trata de un sector productivo, donde se elaboran bienes y servicios, donde se genera valor y beneficio, donde se crea empleo y riqueza. Es también un espacio donde se llevan a cabo intercambios que inclinan significativamente las balanzas comerciales de los países y sus capacidades de decisión autónoma. La mirada sobre la cultura se ha vueltocentral hoy, al punto que puede considerársela casi como una moda en algunos ambientes, aunque en otros siga siendo ignorada o subestimada como algo decorativo. Quizás por esa misma razón es que hemos dejado prácticamente de hablar de políticas culturales, restringiéndonos al espacio más estrecho de la Gestión Cultural, entendida como acción circunstancial provista de un conjunto de técnicassupuestamente probadas. Paradójica y casi mágicamente se han puesto de moda en nuestro país los Planes Estratégicos, que presuponen una visión y una serie de metas a alcanzar mancomunadamente. Pero estos suelen caracterizarse por el carácter descendente de propuestas clonadas. Se invocan públicos desconocidos, actividades escasamente registradas y formas de participación y de representación muycuestionables; y sólo sirven como área por dónde canalizar “gastos” difíciles de controlar o para justificar sueldos abultados de amigos del intendente de turno. Una acción cultural puede consistir en organizar un recital en el anfiteatro o colgar una muestra de pintura en Casa de la Cultura, lo cual no necesariamente requiere estar inscripto en una política, puede ser algo puntual y absolutamenteindependiente. En cambio si hablamos en términos de políticas culturales pensamos que hay un diagnóstico previo de la situación, una toma de decisiones acerca de qué rumbo seguir, la definición de objetivos a alcanzar, un plan de acción para alcanzar esos objetivos, una serie de criterios para evaluar esas acciones. Es decir que una política cultural debe reunir un conjunto de acciones, coordinadas ypuestas en función de unos objetivos comunes; evidentemente no es lo mismo una política cultural que una acción cultural, que una gestión cultural.
Hemos escuchado decir en más de una ocasión que en esa supuesta batalla entre Corrientes y Gualeguaychú por ser la capital del carnaval, la estetización del nuestro permite superar el lujo asiático iconfundiblemente correntino. Lo cierto es que la...
Regístrate para leer el documento completo.