Deber

LOS RETARDADOS SOMOS NOSOTROS
En mi primer día como docente, todas mis clases iban saliendo bien. Ser profesora iba a ser cosa fácil, pensé .Llego entonces la séptima hora .la ultima del día .Mientras me encaminaba al aula, oí un choque de muebles. Al darme vuelta, vi un chico aplastando a otro contra el piso.
-¡Escucha retardado! – gritaba el de abajo –. – ¡Me importa un rábano tu hermana!-No la toques, ¿me oístes? – lo amenazo el chico de arriba.
Adelante mi personita y les ordene que dejaran de pelearse. De repente, catorce pares de ojos estaban clavados en mi cara .Sabia que no lucia demasiado convincente .Los chicos se miraron primero uno al otro, después a mí y finalmente volvieron a sus asientos .En ese momento, el profesor del otro lado del pasillo asomo la cabeza por lapuerta y les grito a mis alumnos que se sentaran e hicieran lo que yo decía. Me sentí totalmente impotente.
Trate de dar la clase que había preparado, pero me enfrentaba a un mar de rostros cautelosos. Al terminar la hora, detuve al muchacho que había provocado la pelea .Lo llamare Mark.
-Señora, no pierda su tiempo – me dijo –.Somos retardados. Y salió del aula.
Aturdida, me desplome en la sillapreguntándome si había hecho bien en ser profesora. ¿Escapar era la única cura para problemas como ese?
Me dije a mi misma que sufriría un año y que después de casarme, ese verano, haría algo más gratificante.
-Te sacudieron ¿eh? – Era el profesor que había entrado antes en mi clase. Asentí con la cabeza.
-No te preocupes – dijo – .Tuve a muchos durante el curso de verano. Son solo 14 y, detodos modos, la mayoría de ellos no va a terminar. No pierdas tiempo con esos chicos.
-¿A qué te refieres?
-Viven en chozas en los campos. Son mano de obra barata, hijos de cosechadores golondrinas. Vienen al colegio cuando tienen ganas .El chico del piso había molestado a la hermana de Mark mientras recogían chauchas juntos .Hoy al medio día tuve que decirles que se callaran. Mantelos ocupados yquietos .Si te causan problemas, envíamelos a mí.
Mientras juntaba mis cosas para ir a casa, no podía olvidar la cara de Mark al decirme “Somos retardados” .Retardados. La palabra me daba vueltas en la cabeza .Comprendí que debía hacer algo drástico.
Al día siguiente, por la tarde, le pedí a mi colega que no volviera a entrar en mi aula .Necesitaba manejar a los chicos a mi modo. Volví al aula ehice contacto visual con cada alumno .Después fui al pizarrón y escribí ECINAJ.
-Este es mi nombre –dije –. ¿Pueden decirme que significa?
Me dijeron que mi nombre era “extraño “y que nunca lo habían visto .Me acerque otra vez al pizarrón y esta ve escribí JANICE .Varios de ellos lo dijeron en voz alta y me miraron divertidos.
-Tienen razón, mi nombre es Janice –asentí –.Tengo problemas deaprendizaje, algo que se llama dislexia .Cuando empecé el colegio no podía escribir bien mi nombre .No podía deletrear y los números me navegaban por la cabeza. Me clasificaron como “retardada”. Es cierto; yo era “retardada “.Todavía oigo aquellas voces horribles y siento la misma vergüenza.
-¿Y cómo llego a ser profesora? –pregunto alguien.
-Porque odio los rótulos, y porque no soy estúpida y meencanta aprender .Este será el tema de nuestra clase .Si les gusta el calificativo “retardado”, no tienen nada que hacer aquí. Cambien de clase .En esta aula no hay retardados.
“No voy a ser blanda con ustedes –continúe –.Van a trabajar hasta ponerse al día .Se recibirán y espero que algunos vallan a la universidad. No es una broma, es una promesa. No quiero volver a oír la palabra “retardado” enesta clase. ¿Está claro?”
Me pareció que estaban un poco más erguidos en sus asientos.
Trabajamos mucho y muy pronto los progresos fueron fantásticos. Además, en la clase había varias promesas. Mark, sobre todo, era brillante .Pasaron los meses y los progresos eran fantásticos. Un día, me dijo.”Pero la gente sigue diciendo que somos estúpidos porque no hablamos bien”.
Era el momento que yo...