defensa del virreinato en el siglo xii
En su momento, Sotomayor escribió a la corte que este corredor permitiría importar caballos desde el Paraguay. En Chile, los caballos tenían precios demasiados altos para el presupuesto militar. La situación de escasez se debía a que los chilenos preferían la cría de mulas que tenían buenos precios en Potosí y no eran confiscadas a través de derramas por los gobernadorespara el ejército. Tampoco eran robadas por los indios como ocurría con los caballos.
La estrategia defensiva de la corona para el sur del Perú enfrentó obstáculos serios, comenzando con la escasez de población blanca que podía ser llamada a las armas. ¿Cuántas personas, por ejemplo, podrían resistir una invasión de holandeses? Después de todo, para la corona, los chilenos ni siquiera habíanpodido contener una rebelión de indígenas. La inquietante pregunta tenía una respuesta deprimente: muy pocos. Había solamente unas 340 unidades domésticas en Santiago, 40 en Mendoza y 34 en Concepción.13 Con estos números, no puede extrañarnos que los gobernadores insistiesen en la pobreza de Chile como un impedimento para garantizar la defensa del imperio con los recursos locales. “Acá nadie puedeayudar ni con un vaso de agua”, protestó Alonso de Rivera (1601-1605) cuando llegó a Chile para organizar la defensa después de la rebelión indígena. Para evitar extraer más recursos de los civiles, Rivera inauguró su mandato con un plan que buscaba proveer al ejército de algunos recursos materiales esenciales para su manutención. Organizó un plan para la práctica de la agricultura en las estanciasreales y apuró la importación de ganado desde el actual territorio argentino para poblar esas estancias reales. 15 El situado que subió a los 212.000 ducados anuales pagaría por sueldos y por otros gastos de manutención de las tropas. 16 Pero las importaciones de bienes para las tropas inauguraron un flujo interesante de recursos naturales hacia Chile.
UN VOLCÁN, UNA PLAGA Y UNA TREGUA
Parael Consejo de Indias, una amenaza de invasión desde el Pacífico, como la que podían hacer los holandeses, tenía una alta prioridad en el esquema defensivo del Perú. Cuando los holandeses finalmente tomaron Valdivia, pero no pudieron consolidar su presencia en Chile, el diseño de esta estrategia develó ser el correcto. Pero las causas del fracaso de los holandeses para permanecer en la Araucaníadeben buscarse en una combinación de variables que ejemplifican la agencia de la naturaleza en los procesos históricos. En el diario de la expedición
holandesa a Chile, su jefe escribió que las dificultades eran la falta de suficiente
comida y de leña seca para cocinar y calentarse.19
La escasez de estos recursos naturales vitales para la supervivencia fomentaron las deserciones. Loshombres pescaban y cazaban, pero eran los nativos quienes les proveían de comida, con algo de ganado y algunos vegetales. Pero este intercambio agregaba otra dificultad, porque se trataba de dar comida por armas. Cuatro o cinco cabezas de ganado equivalían a cinco armas con sus municiones; o a espadas y otros elementos de guerra. El que las armas cambiasen de manos era peligroso. Y no podía prolongarsedemasiado en el tiempo tampoco. Los araucanos decían que la naturaleza tenía la culpa de la escasez de alimentos, porque no habían podido plantar debido a tormentas que duraban 40 días cada una en los últimos ocho años, y a terremotos y temblores que habían arruinado todo lo demás. Algunos habían sido tan fuertes que habían “sacado a los árboles de raíz del suelo”. Igualmente, más tardeprometieron traerles comida siempre y cuando el pago fuese inmediato.20 Los términos de este trato revelan quiénes estaban, en última instancia, controlando la situación y a través de qué mecanismo. Al final, los holandeses resolvieron marcharse, aunque prometieron regresar mejor equipados y con esclavos negros. Esto último era para tranquilizar a los nativos que temían ser puestos al servicio de los...
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