DEL LADO DE LOS PODERES Resumen
EL HORROR DE QUE LAS LÍNEAS SE
MUEVAN
En la historia, el miedo que sienten los que tienen el poder de que el monopolio del sentido se les escape de las manos tiene una legión de ejemplos. Para no tomar más que uno de ellos, recordemos las leyes que prohibían a los negros el aprendizaje de la lectura, especialmente en Carolina del Sur, donde siguieron vigentes al -menoshasta la mitad del siglo XIX, tal cómo nos lo recuerda Alberto Manguel en su Historia de la lectura.
Los propietarios de esclavos temían que los negros encontraran en los libros ideas
Revolucionarias que constituirían una amenaza para su poder, ya sea que tuvieran la posibilidad de leer volantes llamando a la abolición de la esclavitud, o incluso que a través de la lectura de la Biblia, seabrieran a las ideas de rebelión, de libertad.
Manguel evoca a esos propietarios de plantaciones que colgaban a cualquier esclavo que intentara enseñar a leer a los demás. Evoca también a esos esclavos que a pesar de todo aprendieron a leer por los medios más insólitos.
Cómo cierta mujer que había aprendido el alfabeto mientras cuidaba al bebé del propietario de la plantación, el cual jugaba con cubosen los que estaban inscritas las letras. Cuando el propietario la descubre, la golpea a puntapiés y luego a latigazos.
Más recientemente, Manguel recuerda, por ejemplo, que Don Quijote fue prohibido en Chile en 1981 por la junta militar, porque Pinochet pensaba (con razón, dice Manguel) "que contenía un alegato en pro de la libertad individual y un ataque contra la autoridad en turno".
Yustedes saben hasta que grado los últimos años han sido prolijos en locuras de esté tipo, particularmente en lo relacionado con el ascenso de los integrismos.
En Egipto, por ejemplo, se llegó incluso a controlar la circulación de Las mil y una
noches. Y en ese mismo país, y también en Irán, Turquía y Argelia, se ha perseguido o asesinado a escritores.
Por ejemplo, me llamó la atención un detalle. Setrata del imán Jomeini, que el que pronuncio la fatwa contra el escritor Salman.
Rushdie, clamando por su muerte. Antes de su regreso a Irán y de subir al poder, Jomeini vivía en Francia en un suburbio de la región parisina, pues nuestros dirigentes de ese entonces habían tenido la buena idea de otorgarle asilo. Cuando Jomeini salía de su casa
para hacer un poco de ejercicio, nunca alzaba losojos para no ser corrompido por
el Occidente. Me parece que fue precisamente Rushdie quien menciona ese detalle durante una entrevista en la televisión.
Así pues, leer es arriesgarse a ser alterado, invadido, a cada instante. Y el miedo al libro es también el miedo a esa invasión, el miedo a una fisura de nuestro ser, que provocaría el desplome de todo el edificio, de toda la armadura que unopiensa que es su identidad: Cuan frágil, cuan mortífera identidad, esa que no puede soportar la más mínima alteración, la más mínima novedad, el más mínimo movimiento.
Para entender mejor esas facetas del miedo al libro, sigamos un poco más con Rushdie, quien conoce bien ese miedo, porque ha sufrido sus consecuencias. Lo evocó en un cuento intitulado "Harun y el mar de las historias: Durante laaventura, Harun, que es el hijo de un cuenta cuentos, conoce a un personaje llamado El maestro del culto. Ese Maestro del culto
tiene una ambición en la vida: quiere destruir todas las historias. Entonces Harún le pregunta: ¿Pero por qué detesta usted las historias hasta ese grado? Las historias son chistosas.... El maestro del culto le responde: "Sin embargo, el mundo no es chistoso .
El mundo estáhecho para ser controlado. Todos están ahí para ser dirigidos. Y en cada historia única, dentro de cada corriente de historias, hay un mundo, un mundo historia que yo no puedo controlar.
He ahíla razón":
Creo que Rushdie da en el clavo: las historias, las ensoñaciones subjetivas de los novelistas, en especial, son incontrolables, y por lo tanto son inquietantes para quien pretende controlarlo...
Regístrate para leer el documento completo.