Del sentimiento de la belleza
Tanto empeño en un trabajo ytanta negligencia en otro prueban evidentemente que la primera ciencia es mucho más fácil que la segunda, y que hay medios más expeditos para observar atentamente los fenómenos de la inteligenciacuando investiga la verdad, que los de la voluntad cuando busca el bien o huye del mal.
Añádase a esto que concurren frecuentemente de tal manera, que suelen confundirse las ideas y los sentimientos.En los estudios más abstractos, el de Matemáticas por ejemplo, hay por lo menos un sentimiento que nos guía, y es el de la curiosidad, que es innato en el hombre. La curiosidad satisfecha es lafuente del placer que experimentamos cuando hemos entendido y resuelto bien un problema de Geometría o de Mecánica. Pero otro placer de diferente especie es el que resulta de comprender bien una teoríaentera, contemplando el enlace maravilloso, el encadenamiento bien concertado de los diversos pensamientos que la componen. El sistema de la atracción newtoniana que sometió a una sola y única leytodos los movimientos planetarios, es el ejemplo mejor que puede presentarse de la belleza de la verdad; porque es imposible estudiarle y abrazar con el entendimiento todas sus partes sin sentir unaimpresión de la misma especie que la que causa un hermoso edificio o una excelente composición poética.
Este placer que sentimos al percibir muchas verdades enlazadas íntimamente entre sí procede del...
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