Democracia, solidaridad y sociedad
Por Tony Escorcia
La presente disertación hace alusión a la forma como el ejercicio democrático en una democracia de corte liberal en una nación latinoamericana como la nuestra impide la formación del tejido social necesario para el desarrollo de la sociedad, dinámica creada gracias a un ejercicio desviado del poder político, el cual se aleja de las banderasque enarbolan la práctica de la representación democrática del poder del pueblo, privilegiando los intereses particulares de una clase social o grupo económico específico.
La palabra democracia se deriva de dos palabras griegas: la primera, demos que significaba pueblo y la segunda kratos que significaba poder, poder del pueblo. En la actualidad personifica un poder expresado en la representaciónde los intereses de una comunidad por intermediación de unos líderes encargados por vía de la decisión popular, de gestionar la solución de los problemas básicos que enfrenta la citada comunidad ante un conglomerado de mayor extensión con un pasado relativamente común, al cual podríamos denominar nación y el que se encuentra ubicado espacialmente ubicado al interior de los límites de unterritorio. Vale decir que dicha representación en la antigua Grecia y Roma, la dignidad que implicaba representar a los ciudadanos era una actividad ad honorem, esto es, la retribución era únicamente honorífica, de hecho estos dignatarios para tener el favor de sus representados generalmente realizaban festividades para agasajar a sus patrocinados, ejercicio que no tiene nada que ver con lo que sucede ennuestra actual sociedad.
Ahora bien, partiendo de la anterior definición del término democracia de su significado en nuestro contexto particular, se hace preciso resaltar la existencia durante su ejercicio más saludable, la influencia de una serie de fuerzas, contrapuestas en su mayoría, que dan forma y que pretenden encontrar un equilibrio en el ejercicio del poder político. En virtud de ello,la existencia de un modelo casi estandarizado en todas las democracias actuales (y digo casi porque si generalizo probablemente surja alguna nueva forma de gobierno que pueda ser definida dentro de los límites de la definición de una democracia cuyo ejercicio salga de los parámetros establecidos), es la presencia de tres formas de expresión del poder del estado en la vida de los administrados, laprimera representada por el poder legislativo (quien hace las leyes), el poder ejecutivo (quien por medio de la coerción pretende su cumplimiento) y el poder judicial (quien administra justicia sobre quienes trasgredan la normatividad). Bajo este tipo de sociedad los administrados cuentan con mecanismos de participación en las decisiones que los afectan y con la garantía de rechazo de las mismasdentro de ciertos parámetros fijados por la misma ley.
En consonancia con los preceptos que busca cimentar el ejercicio democrático, el valor por excelencia que se predica es la libertad del individuo, obviamente limitada en la medida que su ejercicio pueda trasgredir las libertades de sus congéneres. De esta forma el individuo adquiere una especial relevancia en la medida que dicho ejercicio de sulibertad le permite alcanzar diferentes niveles de trascendencia personal en diferentes ámbitos de la vida. Privilegia entonces el ser humano su individualidad por encima de los intereses comunes, intereses cuyo fin tan se predica en una democracia, el bien común, bienestar para todos, pero lo que significa en realidad es una oportunidad (para unos mayor que para otros) de alcanzar ese bienestarbajo una óptica de trasparencia y equidad, igualdad de oportunidades y ante la ley.
¿Pero es cierto incluso esta representación de equidad? En la realidad tendríamos que hilar más fino para determinar la eficacia en la aplicación de estos preceptos en la vida de un colombiano cualquiera escogido al azar. ¿Es posible entonces que bajo las actuales condiciones económicas por las que atraviesa...
Regístrate para leer el documento completo.