Deontolog A Individual Ramiro



Guía Individual sobre las propuestas éticas y la profesión docente

Las profesiones han surgido a lo largo del tiempo, y continúan surgiendo para dar respuesta a las necesidades sociales. Así, se puede decir, sin temor a equivocarnos, que son realidades dinámicas. Según las circunstancias, las profesiones modifican sus metas, las formas de acceso a ellas, las relaciones entre los colegas delcolectivo profesional y con los usuarios. El profesional es una persona que ha adquirido determinadas competencias, reconocidas socialmente para aportar un bien o un servicio a los demás y a la sociedad; así, por ejemplo, colabora en el proceso de la educación de los hijos, brinda asesoramiento legal, soluciona los conflictos en la familia o planifica la construcción de vías de comunicación entreunos lugares y otros. Con el ejercicio de cualesquiera de esas actividades, el profesional pretende ganarse económicamente la vida. La importancia social y moral del ejercicio de una profesión, en este caso en particular la docente, reside en el bien específico que aporta a la sociedad en general o a los miembros de la misma.
El educador no debe dedicarse a transferir conocimiento, a lo que Freiredenomina "educación bancaria", sino que debe generar las condiciones para su propia producción o construcción, para el aprendizaje crítico, para ello debe -al igual que los educandos- tener espíritu inquisidor, ser curioso, persistente, instigador, creador y humilde, para poder construir y reconstruir conjuntamente saberes. Además el educador debe respetar los saberes de sus educandos, lasconstrucciones que trae consigo producto de sus vivencias y de sus orígenes y a partir de ellas construir conocimiento.
La ética de la justicia tiene como fin la aplicación de principios morales abstractos en el respecto a los derechos formales de los demás. En un contexto educativo, adquiere gran relevancia este aspecto en la práctica docente, dado que son múltiples los actores que se desempeñan en elmismo, y los cuales necesitan de normas que regulen sus relaciones, que sean generalizadas. El docente debe asumir un rol imparcial para con quienes interactúa.
La ética del cuidado entiende al ser humano como un ser en relación, rechaza la idea de un individuo ensimismado y solitario. El sujeto humano no está cerrado en sí mismo, sino vinculado a una realidad social y a otros seres humanos. No esabsolutamente independiente y necesita a otros en situaciones de carencia o vulnerabilidad. También requiere que se le reconozca en el resto de situaciones y que los otros den significado a sus acciones y a sus proyectos. Además, las acciones humanas involucran a otros, es decir, las acciones de una persona o grupo de personas aumentan o limitan las posibilidades de acción de las demás personas.Por eso, se afirma que el hecho ontológico de la interdependencia provoca que la misma práctica del cuidado se aprenda en función de las condiciones de posibilidad creadas en las relaciones interpersonales concretas.
Desde la perspectiva de la ética del cuidado, el buen ejercicio profesional docente comprende la creación de relaciones de confianza mutua, que permiten al profesor conocer a sualumno y plantear las intervenciones educativas en función de los intereses y las necesidades del mismo. El profesional de la docencia es invitado a diseñar su intervención con base en preguntas del siguiente tipo: ¿Cómo mi asignatura puede servir a las necesidades de cada uno de mis estudiantes?, ¿cómo puedo ayudarles en la promoción de su inteligencia y sus afectos?, ¿cómo puedo lograr contacto conla mayor parte del alumnado?, ¿cómo puedo ayudar a que cuiden de sí mismos, de otros seres humanos, de los animales, del entorno natural, del entorno hecho por el ser humano y del maravilloso mundo de las ideas? (Noddings, 1992).
En el caso del “profesor militante” encontramos una clara oportunidad para lo que Freire denomina corporizar las palabras en el ejemplo como acto de enseñanza1. El...