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A sólo dos meses del duelo de cuartos de final ante el sorprendente Kazajstán, el futuro de la Argentina en la Copa Davis parece lejos de ser tranquilo.

Que la (mal llamada)"ensaladera" sigue siendo un tema espinoso entre los jugadores argentinos se puso de manifiesto hoy en Portugal, cuando una simple pregunta le "apagó" súbitamente la sonrisa a Juan Martín delPotro tras su triunfo en el torneo de Estoril.

Ante la consulta "¿vas a jugar la Davis?", Del Potro respondió con un escueto y seco "no sé", que repitió, con cara de pocos amigoscuando se le preguntó cuando iba a decidir sobre este asunto.

El ganador del US Open admitió, sin rodeos, que no quería abordar este tema.

Los problemas del equipo se remontan anoviembre de 2008, cuando Argentina perdió la Davis en casa ante España, en medio de rumores sobre conflictos entre los jugadores.

Hace pocos días, David Nalbandian aumentó la presiónsobre su colega, exhortándolo a aceptar una eventual convocatoria del capitán argentino Modesto Vázquez.

"Es importante contar con un buen equipo y con Juan Martín" para el choque del7 al 9 de julio en Buenos Aires, dijo Nalbandian.

Que no se lleva de maravillas con algunos de sus compatriotas con los que comparte las canchas del mundo, Del Potro no lo dice contodas las letras, pero en Estoril lo dCuando le preguntaron esta tarde qué jugadores le habían llamado para apoyarlo y motivarlo durante su lesión de muñeca, que lo mantuvo lejos de lascanchas casi todo 2010, el hombre de Tandil respondió: "Federer, Nadal, Murray, casi todos".

"¿Te llamaron también argentinos?", quiso saber un periodista entonces. "Algunos amigosque tengo", dijo Del Potro con mirada más elocuente aún que sus palabras.

Sin duda, la espina de la Davis todavía le duele a Del Potro, más allá de su alegría por el título en Estoril.