derecho del consumidor

INTRODUCCION
Consumo. Se trata de una necesidad desenfrenada, instalada en todos los ámbitos sociales, de medir o valorar las capacidades ajenas a través de la tenencia de bienes.
Así, se crean necesidades, se otorgan múltiples y cada vez más sencillos medios de pago en base a ingresos futuros.
El hábito de recurrir al crédito se ha instalado en la sociedad de consumo de una manera patente yéste se ha convertido en un producto más de adquisición.
De tal forma, el uso del crédito por parte de particulares para acceder a bienes y servicios seduce y convoca a las economías familiares, resignando ahorro y afectando los ingresos normales del hombre común.
En realidad, el sistema capitalista fomenta el consumo sin reparar en cuál sea la capacidad de pago de la persona concreta y es aquídonde se plantea un fenómeno de notable ambivalencia. En efecto, por un lado, el dador de crédito y de bienes y servicios, que no repara ante su interés de vender y, por el otro, el consumidor que muchas veces no tiene en cuenta el nivel de compromiso que adquiere.
Ahora bien, cuando la persona advierte su nivel de endeudamiento, que sobrepasa su capacidad económica, deviene la situación de crisisy la necesidad de reestructurar sus deudas.
Nuestra legislación, que bien podría ser adecuada para empresas de cierto gran porte y patrimonio, no provee una solución acorde a las necesidades actuales del consumidor; la mayor parte de las legislaciones en el plano internacional se inclinan por procurar una solución negociada y, ante el fracaso o evidencia de imposibilidad de solución por dichavía, procuran imponer un camino transaccional para satisfacer equilibradamente las deudas desatendidas sin desmedro de los derechos de la persona humana. Así es que, por un lado, se protege la vivienda familiar y sólo una parte, importante, pero no total, de los ingresos familiares, se destinan al pago escalonado de las deudas.
Nuestra Ley 25.065 no prevé un trámite especial para los consumidores opersonas físicas (en rigor tampoco lo preveía la anterior 19.551 de 1972 ni sus sucesivas reformas hasta 1995) y la uniformidad que presenta al proveer un único sistema no favorece la solución preventiva de la insolvencia del consumidor ni la liquidación equilibrada para el cobro de los créditos sin afectar a la familia o a los derechos fundamentales de la persona.
Pero esta deficiencia, no sesuperará de modo voluntarista, pues necesita de una urgente reforma del modelo que atienda las necesidades actuales y proteja al consumidor sin dejar de tutelar los derechos de cobro de sus acreedores.
Será necesario que el legislador discrimine las diferencias existentes entre, por ejemplo, una sociedad comercial y una persona física y les asigne otros igualmente diferentes procesos para que seresuelvan los conflictos que aquéllos mantengan con sus acreedores.
Sólo esa imprescindible discriminación arrojará frutos y posibilitará que el inútil procedimiento concursal, tal cual hoy se aplica a los consumidores, sea superado para beneficio no sólo de estos sujetos individuales, sino también de sus familias y de la comunidad toda.

BIEN JURIDICO TUTELADO
Si bien el sobreendeudamiento delos consumidores ha sido una preocupación constante para especialistas y legisladores en buena parte del mundo, en los últimos años, como consecuencia de la fuerte crisis desatada en Europa y los EE.UU., ha pasado a constituir un tema que está en los primeros lugares de la agenda, puesto que sus consecuencias golpean a grandes sectores de la población que ven disminuir sustancialmente a sus ingresosy que, paralelamente, asisten al incremento de sus deudas en proporciones cada vez más importantes.
En nuestro país la cuestión no alcanza la dimensión que sí tuviera a principios de la década anterior y que se expresara fundamentalmente en materia hipotecaria. Más allá de imperfecciones, las sucesivas prórrogas de las ejecuciones y las leyes de refinanciación hipotecaria, junto con la...