Derecho
Chiave era un hombre con una vida simple, vivía de lo que la naturaleza le ofrecía, cultivando y criando algunos animales, era una persona apreciada por su cordialidad y sentido del humor.Tenía un agrado especial en poder ver el esplendor que le brindaba el amanecer y el atardecer, buscando siempre un lugar nuevo en donde apreciarlos, y cada vez había un rayo de luz distinto o unanube especial. Había comprendido donde ver la vida y a apreciarla.
Un día haciendo un recorrido alrededor de sus tierras le llamó la atención una flor, tenía colores amarillos y azules, no había vistouna así antes, era frondosa, pero estaba marchitándose, -Es una lástima- pensó, -No creo poder encontrar una igual y sería sorprendente ver una colina recubierta con estas flores.-
Dejó de observarla flor cuando escuchó unos pasos acercándose por detrás. Era una mujer, con una manera de andar vivas y segura, debía ser forastera por que no la reconocía. Aun así ella siguió acercándose al lugardonde él estaba. Sin cruzar palabra, ella llegó junto a él y se inclinó para poder ver la flor, la tocó suavemente y le dijo, -Ésta especie al morir la flor primera permite nacer a muchas otras.Raras veces veo una de estas, solo se logran reproducir en el ambiente necesario-. Has de viajar mucho ¿De dónde eres? –dijo Chiave. Ella respondió: -Tengo un camino que recorrer, y es lo que hago,donde inicié, no es muy importante, soy un poco de cada lugar, así como cada lugar es un poco de mi.
Conversaron por un momento, Chiave se encontró fascinado con las palabras y el misterio que encerrabaesta mujer de nombre Perlavita. Conocerla le fue extraño y agradable, ella se encontraba de paso y debía seguir su camino.
Al verla caminar hacia el ocaso, chiave se preguntó si ella estaría bien,bueno, no conocía el lugar, podía ser peligroso para una mujer de caminar sola entre esos bosques. Después de un tiempo ella e alejó lo suficiente como para no poder verla, y dentro de él nació...
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