Derecho

Campesinos de Cararabo torturados por las fuerzas de seguridad

El 26 de febrero de 1995, miembros del grupo guerrillero Colombiano ELN (Ejército de Liberación Nacional cruzaron la frontera con Venezuela y lanzaron un ataque por sorpresa contra una base naval en Cararabo, Estado Apure, en el que mataron 8 marinos Venezolano. Tras homicidios, algunos de los cuales pueden haberse tratado deejecuciones extrajudiciales, la marina detuvo 24 personas de Carabobo y sus alrededores Mucho de los detenidos fueron sometidos y se han informado de que uno de ellos, Juan Vicente Palmero, ha “desaparecido”, al parecer murió bajo la tortura.
La Marina afirmo que los campesinos habían participado en el ataque, pero el 15 de Marzo de 1995, todos los detenidos habían quedado en libertad sin cargos. Eltrato físico que recibieron de los Marinos fue de fuerte paliza con palos y otros objetos punzantes, simulacro de ejecución, semiasfixia y, quemaduras. Según los informes una mujer embarazada aborto como consecuencia del sufrimiento, mientras que a otros de los detenidos lo amenazaron con violarlo con un perro.
Muchos de los campesinos también fueron sometidos a torturas psicológicas, entreellas amenazas de muerte a ellos y su familia. Al parecer, dos profesionales de salud posiblemente medico estuvieron presentes en la tortura de dos menores. Según se ha informado, los dos jóvenes que han quedado especialmente afectados por las torturas sufridas.

Durante la primera semana de abril, las investigaciones dirigidas por el juez militar, el teniente coronel Nieto Carrillo, del JuzgadoMilitar de Primera Instancia de Puerto Ayacucho, dieron como resultado la detención de cuatro miembros de la marina en relación con la «desaparición» de Juan Vicente Palmero. Sin embargo, en el momento en que esto se escribe ninguno de los miembros de las fuerzas de seguridad implicados en la detención arbitraria y la tortura de los otros campesinos ha comparecido ante la justicia ni ha sidosuspendido del servicio en espera de una investigación. A Amnistía Internacional le preocupa seriamente que un panorama de impunidad para los perpetradores de graves violaciones de derechos humanos que ha documentado la organización en Venezuela pudiera beneficiar a los responsables de las violaciones documentadas en este informe.

Tras el ataque de Cararabo, la zona fronteriza entre Venezuela yColombia se ha ido militarizando cada vez más. Decenas de colombianos que viven en Venezuela sin permiso de trabajo han sido expulsados del país, y hay informes de que algunos de los deportados fueron maltratados por miembros de la Guardia Nacional venezolana. A varias personas, algunas de ellas periodistas, se les ha negado el acceso a la zona fronteriza. Esto compromete más la seguridad de lapoblación local, ya vulnerable como consecuencia de la suspensión de varias garantías constitucionales en junio de 1994.

Amnistía Internacional condena los homicidios de los marineros venezolanos en la emboscada realizada por miembros del ELN y solicita que los responsables sean presentados ante la justicia. La organización reconoce la legítima preocupación del gobierno venezolano por tomar las medidasadecuadas para proteger sus fronteras de incursiones de grupos armados de oposición de la vecina Colombia, pero cree que ninguna de las medidas que se tomen debe comprometer sus obligaciones de garantizar una protección plena a los ciudadanos y a los extranjeros por igual. A Amnistía Internacional le sigue preocupando que, sin el reforzamiento de las salvaguardias adecuadas ─incluido el finefectivo de la impunidad─ las fuerzas de seguridad continúen cometiendo violaciones de derechos humanos. En una visita al estado de Zulia ─otro de los que tienen frontera con Colombia─ en mayo de 1994, Amnistía Internacional observó que grandes zonas de terreno parecían estar bajo el control del ejército. La delegación supo de varios casos de graves violaciones perpetradas por soldados y otros...