Derechos Humanos

Autor: John Rwals

Capítulo VIII. El sentido de la justicia

Analiza la adquisición del sentido de la justicia por los miembros de una sociedad bien ordenada y considera su fuerza cuando se define por diferentes concepciones morales. Además, examina los atributos naturales por los cuales los seres humanos somos acreedores de las garantías de una justicia igual (que definen la base natural dela igualdad).

El concepto de una sociedad bien ordenada.

Una sociedad bien ordenada es aquella planeada para incrementar el bien de sus miembros, quienes aceptan los mismos principios de justicia, es decir, son públicos y los justifican por las condiciones de la vida y sus miembros las cumplen para mantenerlas.

Establece que para que la concepción de la justicia sea más estable ellodepende del equilibrio de motivos en que se basa, esto es: que el sentido de la justicia que cultiva y los propósitos que estimula deben triunfar, normalmente, contra las tendencias a la injusticia.

Refiere que la estabilidad constituye un aspecto deseable de las concepciones morales, pues la identificación de intereses resultante es una realidad artificial: se basa en el artificio de la razón ylos individuos cumplen con el esquema institucional sólo como medio para alcanzar sus propios intereses; además, agrega que los sistemas son más o menos estables según la intensidad de las fuerzas internas de que disponen para recuperar su equilibrio.

Expone que la estabilidad de una concepción de la justicia no implica que no cambien las instituciones y las costumbres de la sociedad bienordenada, sino que se ajusten a las nuevas circunstancias.

Dice que a través de procesos psicológicos podemos adquirir un deseo de hacer lo justo y una aversión a lo injusto; sin embargo, el aprendizaje moral es una consecuencia natural de una plena apreciación de nuestra naturaleza social, que facilita la base afectiva para los sentimientos morales, que son comprendidos hasta que llegamos a lamadurez.

Refiere que el propósito en su obra es indicar los pasos mediante los cuales una persona puede alcanzar una comprensión y adhesión a los principios de justicia, a medida que va desarrollándose en una sociedad bien ordenada, para lo cual se debe distinguir entre las moralidades de la autoridad, de la asociación y de los principios, ya que el desarrollo moral está ligado a la concepción dela justicia.

La moral de la autoridad.

Primera etapa del desarrollo moral, conocida como la “moral del niño”; en ella, el sentido de la justicia se adquiere gradualmente por los miembros más jóvenes de la sociedad a medida de su desarrollo.

Parte de que la estructura de la sociedad bien ordenada se basa en la familia, en la que los niños están sometidos a la legítima autoridad de lospadres, cuyos mandatos se encuentran plenamente justificados de acuerdo a la interpretación razonable de los deberes familiares.

Las condiciones que favorecen el aprendizaje del niño se debe al amor que le profesen sus padres y por ello sean su objeto de su admiración, de modo que despierten un sentimiento de su propio valor y el deseo de convertirse en la misma clase de personas; además, de que lospadres enuncien reglas claras e inteligibles adaptadas a su nivel de comprensión en la que los padres constituyan ejemplos de la moral que prescriben.

De esta forma, el niño tendrá una moral de la autoridad cuanto esté dispuesto a seguir determinados preceptos que en modo alguno corresponden a sus inclinaciones originales.

La moral del niño es primitiva y temporal, porque en su mayor parteconsiste en un conjunto de preceptos, y no puede abarcar el esquema del derecho y de la justicia, más amplio, dentro de la cual las normas que se le prescriben quedan justificadas.

Concluye que la moral de la autoridad sólo tiene una función restringida en los ordenamientos sociales fundamentales, que se justifica cuando las insólitas exigencias de la práctica en cuestión hacen indispensable...