Derrida, Espectros. Comentario

Trabajo de Taller IV a cerca del libro Espectros de Marx, el Estado de la Deuda, el trabajo del Duelo y la Nueva Internacional de Jacques Derrida.
Marco Octavio Torres García
Facultad de Economía. UNAM
Jacques Derrida llama la atención de los hombres presentes y ausentes para no caer en el fallo de no releer a Marx. Pues no se trata tanto del tratar de resucitar, por resucitar a unespectro como el de Marx, sino de dejarlo pasar, pisar por un momento para ajustar un tiempo donde el mundo se desdibuja. Ajustar, ajusticiar, pero no en el sentido de venganza, aunque si en el sentido de vencer, vencer la hegemonía de un discurso que lleva a la ruina a la humanidad. El pensar en Marx, el llamarle, traerle para renovar, para transformarnos, para un vivir más justamente, es pensar en elsurgimiento de un verdadero orden nuevo de las cosas, una nueva comunidad Internacional. El marxismo en este sentido va en una dirección heterogénea, pero que crea esa alteridad que nos llama, ese hacerse de la herencia que nos deja Marx. El libro, por lo demás bello, nos ilustra a cerca de un acontecimiento que nos concierne, y que no puede soslayarse; el momento de crisis que nos inunda, nosexige hacernos presentes. Hacernos presentes para ajustar lo que se ha desajustado, pues alguna vez se pensó en un mundo mejor, y se piensa que puede serlo en el presente que viene gestándose más allá de nuestra contemporaneidad. La justicia entonces se dibujaría como un acto de libertad, de un accionar las armas, de un tomar la responsabilidad que nos impone esa alteridad compuesta por la injusticiamisma, y por la posibilidad de ajuste.
Es importante para los estudiantes la lectura de éste libro. En especial los estudiantes de este nuevo siglo, que inicia con el anuncio de un derrumbe estructural y una reconfiguración del desorden mismo, que condena a millones a la desesperanza pero que se quiere mantener a toda costa vivo. La guerra está iniciada apenas empezando el siglo XXI y nuevasformas de represión, y de dominación mediática amenazan incluso a la posibilidad de pensarse hablando con el espectro de Marx, y así tomar cartas en el asunto. Se quiere, por ejemplo, en esta facultad, quitar del mapa curricular algunas materias de economía política, pues no hacen falta para este mundo globalizado. Los alumnos también claman por eso, pareciera que los alumnos son de otro tiempo, queno viven su momento, que no harán jamás un acto para regenerar un ajuste, por dar el don por un mejor mundo. Pero incluso, en la academia se da la discusión sólo en éste sentido, el académico, y se corre el riesgo temido por Derrida, domesticar a Marx con el pretexto de quererlo dentro de nuestras vidas. Y qué sentido tenerlo dentro de nuestras vidas, de nuestras casas si no es para transformarla vida misma. A continuación un resumen muy limitado de lo que más me atrajo del libro de Los Espectros de Marx:
Derrida inicia discurriendo con ésta pregunta:
Quisiera aprender a vivir. Por fin. ¿Cómo por fin?
En el exordio Jaques Derrida nos presenta, si cabe, el ansia de hablar del fantasma. El fantasma que es el otro. Y nos dice que aprender a vivir sólo puede tener sentido y resultarjusto en una explicación con la muerte. Entre vida y muerte, es ahí donde está el lugar de una sentenciosa inyunción que aparenta siempre hablar como habla el justo. Como aprender a vivir sucede entre dos, entre vida y muerte, es necesaria la intervención de algún fantasma. Fantasma que se hará presente como un espectro, espectro que no es sino por el espíritu. Por eso para aprender a vivir de otramanera. Pero con los fantasmas. Ser-con los espectros sería una política de la memoria, de la herencia y de las generaciones.
“Hay que hablar del fantasma, incluso al fantasma y con él, desde el momento en que ninguna ética ninguna política, revolucionaria o no, parece posible, ni pensable, ni justa, si no reconoce como su principio el respeto por estos otros que no son ya o por esos otros que...