desacralización en Mapocho de Nona Fernández : ruptura de la historia, la religión y la sexualidad


Desacralización en Mapocho de Nona Fernández : ruptura de la historia, la religión y la sexualidad

Denise Zöllner Iracheta.

Si buscamos el concepto desacralizar, tenemos que en la RAE significa “Quitar el carácter sagrado”. Ahora bien, de acuerdo al texto de Mauro Rodríguez Desacra/lización, único camino[1], el concepto citado se vincula, naturalmente, con la sacralización. Al respectoseñala que el término es un neologismo inventado en Alemania, además que se debe hacer una distinción entre lo sacral y lo sagrado o santo. Para él lo sagrado significa lo que está separado o apartado con las cosas ordinarias; así, lo único que estaría por sobre lo mundano es Dios. En cuanto a lo sacral sería lo “consagrado, es decir, a lo no sagrado en sí, pero referido a Dios de modo especial”.De esta suerte y sin olvidar el carácter mundano, todo lo creado por Dios vendría a ser sacral. De esta manera: “sacralizar no puede ser otra cosa que concretizar en alguna forma sensible una relación ya innata e inmanente; un intento, por una parte del hombre, de dar cuerpo y significado a la experiencia de lo trascendente”[2]
            El autor propone dos formas de sacralizad: la radical,común a todas las creaturas  y otra institucional, personas o cosas consagradas a Dios por determinados grupos humanos. Señala además que “cualquier intento de hacer pasar por absoluto, inmutable, intangible, sagrado, tal o cual aspecto de las realidades eclesiásticas, aparecerá como sacralización exagerada, o pseudosacralización; es decir, como pretensión de despachar en calidad de divino lo que,aunque fundado en relaciones muy íntimas con dios, es co-producto de condicionamientos humanos”[3] .
            Desacralizar, entonces,  para el autor sería “el proceso crítico que desenmascara las absoluciones abusivas de lo sacral.” [4]
Conforme a lo expuesto, podríamos hablar de desacralización no solamente religiosa enMapocho. Cristian Opazo, en Mapocho de Nona Fernández: la inversión delromance nacional, comenta que Nona Fernández, “tiene la osadía de aventurarse en un diálogo (que, a veces, es también remedo) de aquellos textos que han sido institucionalizados por la ley, santificados por la iglesia y tolerados por la tradición”.[5] Si nos abstraemos del concepto puramente religioso expuesto con anterioridad y analizamos ciertas creencias e instituciones, encontramos que dichodiálogo lleva consigo ese proceso crítico antes descrito al analizar también las relaciones amorosas y fundamentalmente una mirada  desmitificadora de la “historia oficial”.  
 
 
Desacralización religiosa
 
La novela presenta de manera reiterada la imagen de la virgen. La abuela es el personaje encargado de la cuota de religiosidad en la novela. Vemos a “la Rusia”, sin embargo, utilizando a lavirgen de la Tirana como muñeca en su niñez y, de una u otra forma, la visión que hay de esta imagen divina se relaciona con el abandono: de alguna manera  la Rusia siente que el brazo protector de la virgen no alcanza para su familia. De ahí su desmembramiento y desgracias. La posición de la Virgen del cerro San Cristóbal de hecho recibe con los brazos extendidos a cierta parte de la ciudad, sinembargo, los otros  (los marginados) deben conformarse con “el poto”. De esta manera, la mirada crítica de la Rusia vuelve profana una imagen sacral:
 
“Dios te salve María. Llena eres de gracia. El señor es contigo. Bendita eres entre todas las mujeres y bendito es el poto blanco de loza que nos brindas desde la altura del cerro. No importa que nos hagas el quite. No importa que nunca te hayasdado el trabajo de mirarnos, de pegarnos una ojeada loca una vez al año más que fuera. Igual tu culo nos protege. No sé  de qué. No sé si son posibles más calamidades, pero de algo peor que se nos podría venir encima nos cuida tu poto blanco. Por eso siempre estás allí, sobre nuestras cabezas, arriba de nuestros techos, por sobre nuestros llantos y nuestros rezos. Te agradecemos la deferencia...