Desarrollo sostenible

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El tiempo transcurrido desde la apertura de la crisis del Estado social, como periodo de transición hacia su ruptura y sustitución por la “forma global mercado” nos permite una aproximación a su caracterización que viene soportada en la crisis actual y en los rasgos que emergen como caracterizadores de la nueva forma de “Estado”. La forma global de mercado, fórmula con la quepretendemos definir la nueva forma se estructura de forma compleja en torno a dos espacios: el global y el estatal. El primero determina el segundo, pues desde el espacio global se condiciona la actuación del Estado, pero, en la medida en que el Estado realiza funciones que solo se desarrollan en su seno, resulta lícito usar el término Estado-mercado, que expresa la forma de inserción de éste enel espacio global, en la forma global de mercado. Es en el Estado donde se materializa el apoyo directo al capital y la reestructuración de normativa del conflicto social, así como las funciones de control fruto del deterioro democrático. Aunque estas transformaciones vienen determinadas por la forma global de mercado que impone el modo de acumulación del capitalismo financiarizado y lareorganización del poder. Poder ya no público sino mixtificado y ajurídico. La interacción de los dos niveles define la forma global de mercado, aunque pueda adquirir un cierto grado de autonomía la forma de Estado mercado, en cuanto en el marco de exigencias concretas que se derivan del espacio estatal. Usaremos ambos términos, refiriéndonos a los dos espacios, aunque sea la forma global de mercado la quedetermine la segunda, absorbiéndola.
Éstas formas están sometidas a tensiones inestables por la crisis sistémica abierta por la crisis financiera. Resultan afectada por los procesos y contradicciones presentes en su interior, pero, a pesar de su inestabilidad, definen con claridad los elementos de contraste con el Estado social, de tal forma, que obligan a hablar de ruptura, más que de crisisde éste. Desde esta perspectiva podemos abordar tanto las transformaciones constitucionales: especialmente la erosión de la normatividad constitucional, paradigma sobre el que se ha construido la teoría de la constitución de la postguerra y del Estado democrático- constitucional, como otros dos conceptos determinantes en la construcción constitucional del Estado social: la democracia y losDerechos sociales, como mecanismos de la reconstrucción del poder y su funcionamiento.
La globalización y la evolución del proceso de integración europea, como modo de inserción y participación regional en el mercado global, se integran en esta forma global de mercado que transciende al Estado. El concepto de forma de Estado alcanza así un dimensión distinta de la que fue su génesis. No es de extrañar.Los cambios en relación con la relación entre el poder y el conjunto social, que se producen en las dos últimas décadas, muta la forma de Estado, no solo materialmente: cambiando el sentido de la relación política-economía, sino formalmente, en cuanto obliga a integrar estas transformaciones en las nuevas formas del poder global.
Llegado a este momento del planteamiento que recorrerá este trabajoconviene detenerse en algunas referencias metodológicas. El acercamiento al Estado social se realiza desde el concepto de forma de Estado y así es como se caracteriza. Desde esta perspectiva, el Estado social adquiere una indudable centralidad constitucional que dota a ésta de sentido introduciendo la necesaria coherencia en el ordenamiento. La relación entre forma de Estado y constituciónmaterial , cuyo contenido viene determinado por la primera , resultan evidentes siendo ambos conceptos inescindibles. Me separo de otras interpretaciones del Estado social, mayoritarias en nuestra doctrina que, considerando la cláusula de Estado social, que abre nuestra Constitución, como un principio jurídico , desvalorizan su alcance, posibilitan su descontextualización constitucional y permiten una...