Descripción

DESCRIPCIÓN

La señora Cantonal era una mujer vecina del pequeño pueblo de Guijuelo. Tenía unos cincuenta y largos años, era regordeta y bajita. La señora Cantonal o Amparo, que era como la llamabalos de Guijuelo, era un ama de casa muy chismosa y algo alocada.
Amparo tenía la cara muy redonda, unos mofletes rosados y el pelo corto y castaño. Cuando alguna de las vecinas le contaba un nuevocotilleo, escuchaba expectante y sus pequeños ojos saltones brillaban igual que diamantes con entusiasmo y sus finas cejas oscuras se arqueaban formando medias lunas. Tenía una boca minúscula y loslabios pintados con carmín rojo que movía muy rápido al hablar. Su nariz era diminuta y respingona y le daba un falso aire de engreída.
Amparo tenía la costumbre de expresarse con muchos gestos. Alconversar, movía las manos de un lado para otro de forma totalmente aleatoria como si fuera una marioneta y, cuando terminaba de hablar, reposaba una mano sobre la mesa y hacia repicar sus largas uñassiempre pintadas contra la superficie.

DESCRIPCIÓN

La señora Cantonal era una mujer vecina del pequeño pueblo de Guijuelo. Tenía unos cincuenta y largos años, era regordeta y bajita. La señoraCantonal o Amparo, que era como la llamaba los de Guijuelo, era un ama de casa muy chismosa y algo alocada.
Amparo tenía la cara muy redonda, unos mofletes rosados y el pelo corto y castaño. Cuandoalguna de las vecinas le contaba un nuevo cotilleo, escuchaba expectante y sus pequeños ojos saltones brillaban igual que diamantes con entusiasmo y sus finas cejas oscuras se arqueaban formando mediaslunas. Tenía una boca minúscula y los labios pintados con carmín rojo que movía muy rápido al hablar. Su nariz era diminuta y respingona y le daba un falso aire de engreída.
Amparo tenía la costumbrede expresarse con muchos gestos. Al conversar, movía las manos de un lado para otro de forma totalmente aleatoria como si fuera una marioneta y, cuando terminaba de hablar, reposaba una mano sobre...