Desde el Living

DESDE EL LIVING
Reflexiones sobre la obra The Living Room, del Leandro Erlich

Conocí la obra de Leandro Erlich en el año 1998 cuando presentaba su "Living Room" en la Galería
Ruth Benzacar.
Enese entonces me encontraba cursando el segundo año de estudios de pintura en la Escuela
Nacional de Bellas Artes Prilidiano Pueyrredón .
Venida de mis primeros años de pasión por la plástica, cuandolos referentes son aún escasos pero
fortísimos, Picasso configuraba el piso desde donde aventurarme a atravesar la ventana mágica de la
obra. Su fuerte composición y disposición de planos en el quecada detalle unifica todo; su mano
pesada, tosca y firme en cada trazo; su desprolija semblanza; su descarado lila junto al verde; su
grises de color infinitamente tensos. Tal atracción me llevó,sin proponérmelo, a transitar en el
mundo de las formas, la composición formal y la síntesis formal y cromática con total comodidad.
Con el tiempo, del suelopicasso fueron creciendo diferentesárboles, arbustos, hierbas, yuyos, flores.
Descubrí el pensamiento en primer plano de la mano de Duchamp y así una dupla que se me
presentó inconciliable: formalización vs. conceptualización.
Con eltranscurrir las experiencias en mi formación, el encuentro con nuevas maneras de hacer y
decir fueron ampliando los referentes y abriendo los caminos hacia el hacer propio.
Mientras tanto la obra que seiba configurando en mi hacer encontrábame siempre disconforme; la
dupla no lograba conciliarse y yo me hallaba irremediablemente inconformista.
Esta palabra empieza a develarme algún secreto.
Puessi conformar es formar-con, entonces in-con-formar es no formar con. Tal vez aquí la
cuestión.
Instalada cómodamente en el mundo del formar con líneas, planos, colores, recortes, materiales,siempre para formar otras formas; componiendo espacios fuertemente formados y equilibrados en el
plano bidimensional con decidida soltura, heme aquí incesablemente inconforme.
Primera pista develada:...