desigualdad de cultura
¿Existe, entonces, una cultura o subcultura de la pobreza? La diversidad de naciones, sistemas políticos, lugares, etnias, costumbres, etc., y la opacidad del sistemaen sus extremos, dificultan hablar al respecto de similitudes y generalizar sin riesgo a equívocos. Incluso no faltan investigadores sociales que aseguran que no existe la pobreza, sino pobres.Varios aspectos se suman a esta complejidad: uno, el estudio del pauperismo y el empobrecimiento están sujetos a modas; ya que si el universo de los pobres no puede ser disociado del resto de la sociedad,los estudios de ésta --en alguna medida-- obligan al análisis de aquéllos, con los cambios metodológicos obligados. O lo que es igual: si en México, en los años sesenta, O. Lewis (1968) puso de modael concepto «cultura de la pobreza», hoy en los Estados Unidos se ha producido un notable cambio en el vocabulario público al respecto y la palabra «pobreza» ha desaparecido prácticamente del mismo.Ha sido sustituida por underclass o lumpen class, la «infraclase», o por la nueva pobreza estructural (aunque el concepto también varía según la óptica que cada científico social --o político--adopten). En Latinoamérica se habla de feminización de la pobreza y en la Unión Europea, para referirse a «los nuevos pobres», los llaman colectivos menos favorecidos (corriendo los gobiernos el riesgo delolvido de los «pobres tradicionales»). En los países de Europa del Este prefieren denominarla como personas con renta baja (Tortosa 1993: 21-27).
En segundo lugar, aun aceptando que podamos hablarde la existencia de una subcultura de la pobreza, generalmente conviene hacer una distinción entre el pauperismo del mundo urbano y el del mundo rural. En la ciudad los sectores de pobres son grandesy, sin duda, el tipo de vida que éstos adoptan es diferente al modo de vida que realizan los pobres campesinos.
Tercero, podríamos hablar de una pobreza del mundo desarrollado o estado del...
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