despedida

Estamos a una semana que empiece el período de sede vacante, 10 días hace que todos nos volvimos“uno” participando de la “super noticia”.
 
Desde que me enteré, traté de escuchar la mayor cantidadde noticias, las cosas más sonadas giraron en torno al sucesor, al nuevo lugar donde viviría Benedicto, hasta que pronto empezaron las especulaciones del complot dentro del Vaticano, TarcisioBertoneempieza a ser un nombre sonado y el Beato Juan Pablo es acusado de ocultar la pederastia durante su pontificado y termina resultando que “la iglesia se había alejado de la sociedad” (entre comillasporque fue una afirmación fuera de contexto y con cita falsa)
 
Entonces resulta que aquella estructura “medieval” pero aceptada como tal, se volvió más atacada que nunca, se volvió una cueva deladrones y corruptos, papas que no ponen en práctica el concilio, un beato es acusado de ocultar delitos y quien acababa de renunciar perdió toda credibilidad y respeto frente al mundo entero.
 
Perocreo que en medio de todo el laberinto armado por los medios de comunicación no nos dejaron oír el grito dado desde el vaticano,  un grito desesperado de Benedicto, un grito que contra todo pronóstico nodecía “No puedo más, la corrupción me abruma”, si no que fue un grito de LIBERTAD: “Hombre, mujer, niño, niña, cristiano, ortodoxo, musulmán: SEAN LIBRES!”“Cura de Kenia, progresista peruano,conservador italiano, religiosa de claustro, religiosa activa, consagrado, laico, joven, anciano, familias enteras: sean libres!”
 
Libertad para quedarse, libertad para renunciar, libertad para vivir,libertad para elegir, libertad, libertad!, no nos hagamos esclavos de la mal entendida obediencia que roba nuestra naturaleza de humanos, no nos hagamos esclavos de la costumbre, no nos hagamos esclavosde una estructura renacentista en Roma, por el contrario seamos libres por La Verdad que traspasa dicha estructura.
 
Me temo, entonces que la palabra que posiblemente resuene en Vaticano por...