Dfd Almeria
LITERATURA 1
PROFESOR: FERNANDO HRENÁNDEZ A.
ALUMNO: RAMIRO HENÁNDEZ RAMÍREZ
GRUPO: 355
El escondite aterrador
Ernesto caminaba por la noche, era una noche de otoño fríaque no daban ganas de salir, iba mirando su celular, y por ir distraído no vio a tiempo el peligro. En una esquina se encontraban los integrantes de una pandilla rival. Cuando los vio ya corríanhacia él.
Entonces corrió en dirección opuesta. Sus perseguidores habían bebido bastante, y por eso pudo sacarles buena distancia, sin dejar de estar en peligro. Corrió varias cuadras sin dejar de mirarhacia atrás. De repente sintió un calambre en la pierna; consecuencia de correr con el cuerpo frío. Alcanzó a duras penas la cuadra del hospital abandonado, de este había muchas historias de terror.Cerca de la entrada vio que la puerta estaba entreabierta.
Se detuvo, y tomándose la pierna que le punzaba de dolor escuchó; ya se oían los pasos de sus perseguidores.
Decidio entonces por entraral hospital, y confiar en que su fama de embrujado hiciera que la pandilla rival no tuviera en cuenta el lugar como posible escondite, que pensaran que él no entraría allí, o que ellos no se atrevierana ingresar.
Entró y cerró la puerta, adentro estaba completamente oscuro. Escuchó como los pandilleros cruzaron frente al hospital, se les oía quejar, ya estaban cansados.
Unos momentos despuéslos oyó volver y murmurar frente a la puerta, para después alejarse por donde vinieron.
Ernesto respiró hondo, había pasado un momento de gran peligro. Quiso abrir un poco la puerta para espiarhacia afuera, toco el picaporte pero este ni se movía. En la oscuridad en que se encontraba, jaló el picaporte, hizo presión desde arriba, pero nada funcionaba, estaba encerrado; atrapado en un lugarsupuestamente embrujado, del cual se narraban espeluznantes historias de terror.
Se le ocurrió que podría salir por una ventana, pero tras girar la cabeza en la oscuridad se dio cuenta que allí no...
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